Estuve haciendo mis entrenamientos los últimos días, al igual que asistiendo a algunas de mis terapias, aunque mantenía ocultas todas mis secciones. Aún no había contado mi condición a mis padres y mucho menos a Yurii, hace muy poco nos habíamos reconciliado y contarle que mi muerte estaba próxima seguro que lo destruiría.
Mi vida se había convertido en una montaña rusa, la forma tan lenta en que las cosas mejoraban y era aterrador aquella caida de la cual no habría forma de subir.
Era un desastre por completo, pero lo único que quería hacer era pasar un tiempo con mi gatito. Hablé con todos mis amigos para lograr conseguir el tan ansiado número de Yuri, para al menos enviarle un mensaje, mi pequeño amigo debía estar avisado de que mi estancia en el mundo sería corta, aunque posiblemente era una mala idea pero no tenía tiempo para pensar en las consecuencias.
Ultimamente miraba todo desde un punto piadoso, porque ahora quería que todos me viesen así, era tan egoísta, nunca necesite su pena, pero ahora deseo que todos sientan lastima de mí. Frustrada cubrí mi rostro con mis manos, soltando un pesado suspiro; era el peor año de mi vida.
A lo lejos pude oír su voz de Yuri, me acomode lo más rápido posible, tenía que salir de mis pensamientos, sonreí al verlo pasar frente a mí, se había convertido en todo un joven adulto, Yuri... Te extraño tanto gatito.
Cuando terminé de amarrar mis patines, mi mente estaba sumida en el suave cabello rubio y los ojos brillantes de Yuri, nunca había notado la clara belleza que irradiaba el lindo ruso, los recuerdos juntos solo eran momentos excitantes y llenos de bromas, un amigo incondicional y probablemente el mejor hombre que tuve frente mi...
No sabía cómo serían mis últimos días, tenía un cierto gusto por imaginarme muriendo entre flores color morado y lila, claro que junto a Yuri, riendo y hablando de todas nuestras aventuras por el mercado; recordando momentos de soledad, sonrisas vagas, frases cariñosas, miradas nerviosas y el dulce olor que desprendía el pecho suave de Yuri.
Era inútil pensar que ese joven chico volvería a verme como persona, me destruí frente a él, nuestra amistad fue un mínimo bache para conseguir mi "venganza", fuí una estúpida.
Amaba a ese chico, tanto que su tonto carácter me parecía tierno, todo de él se había convertido rápidamente en el motor de mi vida.
Estaba tan concentrada en sentirme miserable y arrepentida que no me di cuenta de que en mi presente, estaba sentada, al borde del llanto en la pista pública, lista para patinar.
El sentimiento de dolor, tristeza y arrepentimiento pudieron conmigo, esos patines que me llenaban como persona ahora solo eran unas carcasas fuertes que mantenían mi dolor dentro de ellos, no era arte, era una manera de olvidar las heridas profundas que le dejaba la vida, no era talento, era sufrimiento, no era ____, era un simple títere de la vida y sus sucios juegos.
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Luego de mucho tiempo, ahí está su capítulo xd adiooosss hasta dentro de dos años JASJSJSJS
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Mi amigo, mi todo. «Yurio y tú»
FanfictionHabían pasado años, el recuerdo de aquél joven chico no paraba de rondar tu mente; Lo amabas ¿Cierto? o ¿Solo querías sentirte querida? «Segunda temporada de Te esperaré .» Para los que no leyeron la primera temporada, ___ Katsuki, hermana de Yuri...