11 años antes del accidente...
Water washes cleanUntil they're dry
—Izuku, cariño. Kacchan está en la puerta esperando a que salgas. —La mujer peliverde le comentó a su menor hijo quien se amarraba las agujetas de sus zapatos lo más rápido posible; no quería hacer esperar más a sus amigos y en especial a Katsuki quien siempre era el líder de todas las aventuras y travesuras que hacían. Antes de ir a atenderlos se despidió de su madre con un beso en la mejilla. —Si van al bosque no jueguen cerca del río, ha estado lloviendo estos días y de seguro el nivel del agua y la corriente se ha elevado. —Avisó su madre para después dejarlo ir con los demás pequeños.
—Hey, Deku! —Exclamó el rubio cenizo antes de tomar al castaño de la mano y correr hacia un grupo de niños. Al llegar, Bakugō saludó con todo el grupo mientras que el pequeño Deku saludaba tímidamente desde cierta distancia. Ambos tienen apenas 6 años, pero sus personalidades ya están definidas hasta cierto punto y, sinceramente, ambos son polos opuestos: mientras Katsuki habla hasta por las orejas y no le teme a lo desconocido, Izuku prefiere guardar distancia y encerrarse en su mundo. Por esto, su madre siempre le dice que cuide de Deku antes de salir a jugar.
—Kacchan, qué haremos hoy? —preguntó el azabache.
—Uhm. Déjame pensar — Susurró. —Ya sé! Hoy iremos al bosque a cazar monstruos, en casa tengo unas redes.
—Entonces hay que ir rápido! —Vociferó uno para después irse corriendo al igual que los demás a excepción de Bakugō y Midoriya.
—Mamá dijo que no me acerque al río —musitó cabizbajo, no le gustaba hacerse ver débil y menos en frente de su mejor amigo, pero tiene que obedecer a su mamá.
—Uhm. Entonces tendré que guiarnos lejos del río —contestó antes de tomar la mano de Izuku y empezar a correr con dirección a su casa.
(...)
Los niños iban caminando por el sendero del bosque en fila india con redes en mano. El rubio iba en la cabeza seguido por el peliverde quien lo tomaba de la mano. —Kacchan, crees que cazaremos monstruos con redes de cazar mariposas? —preguntó un rubio dorado quien estaba atento a cada movimiento a su alrededor como si algo fuera a saltar encima suyo en cualquier momento.
—Por supuesto que sí Denki! Papá me dijo que él cazó al chupacabras con estas redes cuando tenía mi edad! —Todos miraron con asombro a Katsuki y con más energías de caza. Claro, todos menos Izuku quien quería preguntarle si podían cambiar de juego, pero ya lo ha molestado lo suficiente con lo de no asomarse al río. Después de un rato caminando, todos se separaron a buscar por su cuenta: Denki miraba dentro de los arbustos, Sero y Mina detrás de las rocas, Krishima arriba de los árboles, Jiro en los agujeros de los troncos de los árboles y Tsuyu y Uraraka que se aventuraban más adentro del bosque. Por su lado, Izuku sólo se dedicaba a seguir a Dean.
—Deku, no podrías buscar monstruos por otro lado? —Preguntó el rubio platino lo más cordial posible puesto que estaba un tanto hostigado y no por estar siendo constantemente perseguido por su mejor amigo, sino porque Izuku se asustaba y gritaba cada vez que encontraba algún animal del bosque o porque simplemente la brisa movía bruscamente las hojas de los arbustos. Y claro, esto era el doble de frustrante cuando volteaba a ver a sus demás amigos jugando con los animales que atraparon, en especial Denki que atrapó una ardilla que tenía el mismo color de su cabello.
—L-lo siento...e-es que n-no quiero estar s-solo —estaba por preguntarle a Izuku que repita lo que dijo, pero el grito de uno de los chicos a la lejanía le robó la atención. Ambos junto al resto de los chicos que estaban alrededor fueron a ver lo que sucedía.
—Chicos! Encontramos más animales por aquí! —Fue lo primero que escucharon de parte de Tsuyu quien estaba acompañada de Uraraka al otro lado del río junto a un tronco caído que conectaba ambas partes del bosque que el río separaba. Sin pensarlo, todos con excepción de Midoriya y Bakugō cruzaron sin pensarlo dos veces.
—Kacchan, no deberíamos...—musitó el peliverdoso tomando la mano del rubio platino.
—No pasará nada, solo será por un rato. —Y Katsuki también cruzó dejando a Izuku solo en un extremo del tronco.
Claramente, no podían dejar a Midoriya solo, mejor dicho, Bakugō no iba a permitir que dejaran a Midoriya solo al otro lado del río, así que tenían que alentarlo a cruzar.
—Vamos Deku! —Gritó Kirishima
—Tú puedes hacerlo, Deku! —Lo siguió Denki.
—No seas marica! —También gritó Sero.
—Sí, Deku. No seas marica y cruza! —Repitió sin mala intención Tsuyu, él no sabía el significado de la palabra, pero sonaba chistosa.
Y no fue el único, ya que todos empezaron a gritar "marica" aunque no supieran el significado, después le preguntaran a Sero o sus padres cuando regresen a casa. Midoriya se asustó. Esa nueva palabra no le gustaba y quería que lo dejaran de gritar, pero tampoco quería desobedecer a su madre. Miró a Bakugō con una mueca de molestia combinada con miedo para hacerle ver que quería que dejaran de gritar eso; Deku quería que Kacchan lo ayude.
—Cruza de una vez, marica! —Gritó Bakugō sin pensarlo lo cual eso entristeció aún más a Midoriya. Su única forma de hacer que esto termine era cruzando.
Izuku cruzó.
Izuku caminó tambaleante.
Izuku cayó.
El sonido del grito de Midoriya y el impacto de su cuerpo contra el agua dejó congelados a todos, pero los despertó sus gritos de auxilio. Midoriya no sabía cómo nadar, tampoco cómo actuar en esta clase de escenario y muchísimo menos tenía la fuerza para no dejarse llevar por la corriente del río. Todos corrieron tras Izuku para no perderlo de vista, pero no sabían como sacarlo. Katsuki actuó casi por inercia y se lanza por Izuku.
Fue fácil llegar a Izuku y evitar que se hunda, el problema era acercarse al borde del río y agarrarse fuertemente de lo que sea, pero lo logró. Logró acercarse al borde y agarrarse fuertemente de la raíz de un árbol, cuando los demás pudieron alcanzarlos, entre todos los sacaron y los acostaron en el césped. Bakugō se levantó rápidamente para ver como estaba Izuku y se rompe a llorar después de cerciorarse que aún respiraba
—Lo siento, lo siento, lo siento... —repitió el rubio entre sollozos y acostado en el pecho del peliverde. —E-esto fue mi culpa. Y-yo le prometí a m-mamá cuidarte. —Y siguió llorando y murmurando cosas que no todos lograban entender debido a sus lloriqueos y porque todos también estaban llorando.
—E-está bien, tú me salvaste. —Musitó el pecoso pasando una de sus manos por los cabellos del rubio.
(...)
—Tomé un decisión! —Vociferó Bakugō alertando a todo el grupo quienes descansaban bajo las sombras de los árboles.
—Qué has decidido, Kacchan? —Dijo uno de ellos.
—Desde el día de hoy, yo seré el protector de Deku: en la escuela, las excursiones, cuando salimos a jugar y cada vez que lo visite. —Se levantó y se arrodilló en frente del peliverde tomando fuertemente de su mano. —Prometo nunca dejarte solo y protegerte de todo y todos.
—Ka-Kacchan, no tienes que-
—No te lo estoy preguntando, te estoy avisando. —Soltó la mano del menor y se dio media vuelta. —Súbete a mi espalda, es hora de irnos y en el camino ideemos la explicación que le daremos a tu mamá.
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Palace; BakuDeku & TodoDeku
FanfictionDónde Izuku necesita dejar libre los recuerdos de Kacchan O Dónde Bakugō siempre estará sentado dentro de un palacio de oro en la cabeza del pequeño Deku O Dónde Todoroki tendrá que esperar, y aprender a limpiar todo este desorden