10 Razones - Reddie

Razón 9.

" 9. Sus labios "

Tenía tantas ganas de besarlo, tenia tantas ganas de probar aquellos labios, no una, ni dos, el quería tener todas las veces de Eddie

Sus labios eran rosas y delgados, era lo que mas deseaba, cada palabra que salía de aquellos labios, cada suspiro, cada sonrisa, quería arrebatar todo de esa boca, tomarla y hacerla suya el resto de lo que tenia de vida y que cuando la lengua pasara por los labios humedeciéndolos sólo fuera para provocarlo y volverla a devorar

Richie le dio otra calada a su cigarro, cada pensamiento que rondaba su mente lo llenaban de ansiedad, una ansiedad que solo el humo del cigarro podía calmar, el veneno aquel no sólo calmaba su deseo si no también le quitaba el frío de la noche

- Te he dicho que dejes de fumar, te hace daño - Eddie lo miro lo suficientemente lejos para no aspirar el humo pero lo suficiente como para estar cerca de Richie

Se lo había dicho tantas veces, se preocupaba por su salud y no quería que Richie muriera de cáncer de pulmón a temprana edad

- Lo sé, pero no puedo dejarlo - el rostro de Richie se veía serio y eso logró preocuparlo aún más

Eddie sabía que no era sólo el frío, Richie había usado su regalo todo el invierno y verlo así, le decía que algo andaba mal

- ¿Porque no puedes dejarlo ah! Richie?, ¿que es lo que te impide hacerlo? - Eddie se acercó demasiado y muy molesto

Richie sintió una punzada en su cabeza y en su corazón, había estado tanto tiempo guardando el amor que sentía por Eddie que ya no lo podía retener más

- Si tanto quieres que deje de fumar porque no cambiamos los cigarros por tus labios - soltó pero Eddie no lo tomo como sus típicas bromas de siempre, tenia un tono diferente

Eddie se armo de valor para quitarle el cigarro de la mano, aventarlo al suelo lleno de nieve, tomar la sudadera negra fuertemente para levantar sus talones, acercase y plantarle un beso a Richie

Un beso, uno pequeño pero lleno de amor, Richie por fin había probado aquellos labios y eran tan suaves como los había imaginado, mil veces mejor

Sus ojos se encontraron seguros y Richie tomó su cintura atrayendolo con fuerza para volver a besarlo, esta vez con desesperación moviendo sus labios para atrapar los contrarios una y otra vez, Eddie correspondía torpemente pero igual de ansioso

Se besaron bajo aquel árbol lleno de nieve hasta la copa, se besaron para contrarrestar el frío de la noche con el calor sus cuerpos, se besaron hasta que sus labios se hincharon pero no se saciaron

Esa fría noche había sido testigo de su primer beso y los que le siguieron

Desde esa noche Richie dejo de fumar