Los meses pasan, todo parece seguir su curso natural. Afrontando los problemas diarios de ser un joven y a la vez ser un sangre de lobo. Rhydian Morris considera que su vida no ha sido tal desastrosa como supuso que sería siendo un chico adoptado. A...
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Con Maddy Smith horas después
Alysha y Johan habían sido los primeros en encontrarla tirada en medio del bosque.
Después de unos minutos, Maddy había llegado al mismo sitio en que estaban los otros tres lobos. Cuando llegó, lo primero que hizo fue acariciar la mejilla de su loba amiga que estaba herida en el suelo.
La manada había quedado dispersada más allá del poblado de Cantoña, todos habían escapado a distintos lugares luego de que la riña había terminado, los del Oeste habían dado un paso al costado cuando notaron la resistencia de sus enemigos, dejaron la riña y prometieron volver cuando menos lo esperaran, volverían a terminar lo que habían empezado. A pesar de ello, muchos habían muerto.
—Tranquila, estarás bien—le susurró Alysha a su herida amiga, la que le tomó la mano con desesperación, la herida en su lado izquierdo le manchaba la sucia ropa que traía-. Respira lento, nosotros te curaremos. No te preocupes por eso—Maddy respiraba con dificultad. Ver a su amiga, ver como se desangraba con cada respiración que daba le hacía un gran dolor en su corazón, Kelie había dado todo de si solo para salvarla a ella. Y ahora estaba muriendo por salvarla.
Y Maddy no había podido hacer nada, lo que le hacía sentir terriblemente culpable.
—Estamos contigo Kelie, solo resiste un poco más—Maddy dejo caer una lágrima de dolor, ver que Kelie cerraba los ojos cada cierto tiempo en un intento por resistir el dolor de los rasguños que Jill le había dado en la riña, le partía el corazón. Su amiga estaba sufriendo un dolor horrible, y nadie sabia que hacer.
La colorina loba no solo era una compañera de manada excelente, sino que era una gran amiga, no por nada se habia sacrificado por Maddy. Para Kelie, saber que su castaña amiga estaba bien recompensada cualquier dolor, cualquier sangrado y cualquier agonía que pudiera sentir. Había salvado a su "manada-amiga". Habia hecho lo que tenia que hacer.
—Encontraremos con que curarte—Johan le tomo de la mano que tenia libre. Él estaba desesperado, no sabía muy bien que hacer, y es que estando en mitad del bosque, sin manada ni medicinas para curar su herida, las opciones se reducían—. Buscaremos alguna planta curativa o algo por el estilo...—Johan sollozo, y se tomó del lado derecho de su cuerpo, él al igual que Alysha y Maddy, también estaba un poco malherido.