Secretos de señoritas

V Capitulo I Parte "El inicio de un Affaire"

Sarai viajaba mirando por el retrovisor mientras se preguntaba ¿Que fue todo eso? ¿Quien era Bruno? Y ¿Que hacia allí y porque le había hablado así? ¿Y como el sabia lo del halloween pasado?
Oliver la observaba totalmente perdida en sus pensamientos y prefirió no dirigirle la palabra.

Al llegar a su casa empezó a sacar su ropa empapada y entre sus cosas, estaba aquel oso gigante que le había regalado Oliver ese dia. Lo tomo y se topó con una fotografía del muchacho y ella abrazados, sonrientes y muy enamorados en el cuello del peluche que decía "Creo que te amo tanto mi vida. Quiero vivir para verte sonreir"

Aquella frase lo fue todo. Sarai se tomo la molestia de analizarla. Prestandole atención al "creo" Ignorando el resto de palabras y empezo a reírse como una foca con retraso repitiendo "Creo que te amo"

El "creía" pero no estaba seguro.... Por lo tanto, sus engaños y las noches en las que Sarai lloraba hasta quedarse dormida preguntándose ¿Por qué había cambiado? Tenían una respuesta y era que "El creía amarla, mas no me amaba" Ahora todo tenia sentido.
Y una vez más recordo aquel fragmento del libro "El amor y sus mil contratiempos"
"A veces mi mente divaga e imagina un mundo en donde tú y yo estamos juntos, a veces recuerdo que me lastimaste y te maldigo.... A veces y tan solo a veces rezo por tu alma y otras tantas veces, espero que  recibas todo lo que tu karma te depara"

Con aquellas palabras lanzó con todas sus fuerzas el peluche hacia un rincón y totalmente desnuda se recuesta en su cama, revisa su celular y nota un mensaje de Milena relacionada con el trabajo de Artes y Música el cual decide ignorar y abre chat con Ginebra escribiéndole:

Hoy fui a la reunión de las damas de rosa, Oliver me dejo allí con su madre... Estaba totalmente desanimada, me senté cerca de la piscina y apareció un joven super extraño... Me ha dejado algo cautivada

Nota como Ginebra rápidamente lee el mensaje y le contesta:

¿Sexy? o ¿Poco sexy?

Sarai responde con letras mayúsculas:

MUY SEXY

Una vez escrito aquel mensaje intento hacer memoria y recordar el nombre "Era algo como Bruno mas el apellido es Luz.. Lucero o algo así ¿Como era su apellido?"
No paraba de pensar en aquel joven y en el instante que le había conocido. Fue tan extraño, sintio cosas extrañas en todo su cuerpo. Palpitaciones aceleradas, cosquilleos extraños en su barriga y una insaciable necesidad de saber más de aquel muchacho ¿Como un hombre que no era su novio podía causar tales emociones?
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el teléfono empezó a vibrar. Ella lo tomó y se lo metió entre las piernas para sentir aquellas vibraciones por unos instantes, era algo que le dio por hacer en ese momento, sin pensarlo era su manera de "darse una caricia" sin sentirse tan incomoda de hacerlo. Tardaba unos breves instantes y luego limpio el celular entre sus sábanas y vio la pantalla de su celular. Se trataba de su novio. Sarai resopla con disgusto y contesta totalmente desganada:
— ¿Aló dime qué pasa?
Y  él le responde algo confuso:
— Queria saber qué sucede... Desde el incidente del hotel ¡No me dijiste nada! Crei que estabas molesta ¿O algo así?
Sarai respira profundamente y dice fingiendo con una voz cálida y romántica:
— No estoy molesta ¿Porque lo estaría? Solo que me quede muda de la vergüenza —suelta una risilla—¡Mi vida! Deja de hacerte ideas tontitas en la cabeza... Lo pasado, pasado ¿Vale?
—Vale amor—manifiesta Oliver—Sarai, quiero que sepas que eres todo para mi, te amo y te amaré... Eres mi tesoro.
—Y tú el mio— responde Sarai sintiéndose incomodada ante las palabras de Oliver. Una vez terminada la llamada volvió a recostarse en la cama y leyó el mensaje que le habia mandado Ginebra que decia textualmente:
"¿Un hombre que no es Oliver te resulta sexy? Sabes, creo que deberías conocer mas personas. Recuerda lo que es igual no es trampa. Lo dice tu amix"
Sarai vio el mensaje y lanzo su celular a un lado de la cama y se dijo a si misma "¿Que pasaria si yo?" Movio su cabeza negando rotundamente una posibilidad de "infidelidad" y tan solo rememoraba el instante en que conoció a Bruno y se limitaba a sonreír.
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Algunos meses atrás.
— He tenido como una pequeña... No  sabria cómo llamarle. Pero es como una idea rondando en mi cabeza por mucho tiempo ¡Me excita por instantes! Pero no estoy seguro de hacerle algo así a Sarai... Quisiera experimentar ¿Como se siente?  Estar con Poison Ivy, tomarla de ese cabello rojizo y someterla a mis mas bajos instintos... Ahorcarla, nalguearla... Que me masturbe con sus manos, con sus pies ¡Que me deje venirme en su cara!– Oliver hace una pausa y mira a su amigo Enrique y continua—¿Como le pido algo así a mi novia sin sonar como un enfermo?
Enrique se queda en silencio totalmente perplejo confundido con una cara de asombro y manifiesta — ¿Hablas de poison Ivy la villana de Batman?
Oliver temeroso mueve la cabeza de forma afirmativa y Enrique empieza a reirse descontroladamente
—¿Tu fantasia es estar con una mujer disfrazada de Hiedra Venenosa? ¡No jodas! Dile a Sarai que se ponga una peluca y un disfraz y ya ¡Metele la verga hasta el fondo!
Enrique era el mejor amigo de Oliver desde hace mas de 3 años, conocido como un joven entregado a los excesos de todo tipo, machista, manipulador pero si llegabas a ganarte su amistad se comportaba como todo un camarada. Su cara era cuadrada, tenia abundante barba, cuerpo fornido, nariz recta y ojos pequeños de color café oscuro. Entretanto Oliver era como un "blanco bronceado" de cara ovalada de cejas abundantes y nariz respingada, delgado pero de brazos y pecho musculoso, cabello negro, lacio y peinado sofisticado, ojos azules y labios rosas.
Dos polos opuestos tanto en físico como en personalidad pero por alguna razón extraña del universo, se llevaban bien, realmente bien.
—Es una muchacha de casa no puedo simplemente ir y decirle algo así como ¡Quiero que seas esta noche una supervillana super sexy para mi!—resopla—¿Sabes lo difícil que fue para mi pedirle que me la chupe? ¡Dios! Y solo lo hace algunas veces cuando ella se da cuenta que realmente la situación lo requiere... Sarai es una chica distinta, sera mi esposa no quiero obligarla a hacerme de todo tan rápido, no hay prisa.
—¿Quieres que tu esposa sea una mujer a la que no le tienes la suficiente confianza como para pedirle que te cumpla una fantasia pendeja? Amigo, realmente creo que te estas perdiendo de muchas cosas a tu edad. Actuas como casado, coges como casado ¡Y no estas casado! No jodas— le reclamada Enrique a su amigo con cierta impotencia al verlo desperdiciando su soltería y juventud en un noviazgo "poco saludable"— ¿Sabes lo que yo haria?
—¿Contratar una prostituta?— le contesta Oliver arqueando una de sus cejas.
—¡Exacto! Contrataría una prostituta y en tu situación le pediría que me haga todo, absolutamente todo lo que mi novia se niega hacerme— explica el joven mostrando una placentera sonrisa de oreja a oreja.
—¡Me niego a contratar una prostituta! Aparte no es el fin del mundo ¿Okey? Solo es una fantasía—explica Oliver mientras agarra la cerveza que le ofrecía Enrique— Una simple fantasía sin sentido.

Enrique lo mira con desprecio y habla— Hasta ahora he cumplido ¡Escuchame bien! Cada una de mis malditas fantasias, bueno excepto estar en una orgia ¿Pero el resto? ¡Pfff! Todas, hice trios, anal, oral, 69, misionero, dedo caliente, dedo frio, besos negros, interracial, mujeres casadas, viudas y estoy trabajando a una gordita que vive por mi casa y a la embarazada que estudia con mi hermana mayor.
—¿Y eso que? Sarai y yo hacemos el amor... Hacer el amor es algo mas, cariñoso, dulce, tierno— manifestaba Oliver—¡Creeme que si Sarai quisiera! ¡Pfff! El kamasutra nos quedaría corto... Pero Sarai es mucho mas tierna, dulce y delicada.
—Respóndeme una sola pregunta—dice Enrique arrinconando a su amigo— Si a ti se te presentara la posibilidad de tener sexo con una chica realmente preciosa dispuesta a ser Poison Ivy por ti ¿Lo harías?
Aquella interrogante saca una pícara sonrisa en Oliver, prefiere quedarse callado y se limita a mover la cabeza negativamente.
Fin del Flahback