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[ Un corazón roto ]

Song: Miracles in December / EXO

Corrí tras ChanYeol, y lo alcanzé en un parque cercano.
Sus ojos escurrían unas grandes lágrimas que en mí vista lo he visto derramar.
Su respiración era confusa, como su voz.

- ¡Chan! - exclamé al acercarme - ¿qué ha sucedido? ¿por qué saliste corriendo?

- N-No quería herírme más - murmuró - yo...

- ¿De qué hablas? -

- BaekHyung andaba con alguien - me miró - y me lo ocultó. Hoy lo conocí, ¿y que pasó? Baek descubrió que estoy enamorado de él.

- Pero... -

- Además - sollozó - me rechazó.

Pude escuchar mí corazón crujir.
Y algo se en mí garganta de repente, como si algo se atorara, se resbaló con dificultad. Yo entendía bien su dolor, muy bien lo sentí.

- Vamos a mí casa - le aconsejé - va a llover y te enfermarás.

- No importa - sorbió su naríz - qu-quiero solo perderme h-hoy.

- ¡No te vas a perder solo orejón! - exclamé dandole un zape en la cabeza - iré contigo.

- Pe-Pero Soo, t-tú no tuviste nada que ver con esto... -

- No importa, eres mí amigo - suspiré - además, yo entiendo tú dolor, e iremos juntos en esto.

- ¿Te enamoraste de JongIn? - asentí - esta bien, quiero ir a una cafetería cerca..

- Vamos... -

Caminamos en silencio.
Una lluvia repentina nos hizo correr al local, entrando empapados y siendo recibidos por un chico alto, de cabello y ojos negros.

- ¿ChanYeol? - preguntó este - ¿qué sucedió?

- Hola JongDae - saludó - pues...

- Esta destrozado el corazón - intervine - ¿tienes algo para su dolor?

- Oh sí - nos indicó la mesa - pasen, Kim JongDae a sus servicios.

- Gracias - jalé al alto - ahora dime, ¿qué esperabas? BakeHyung estaba tan ciego que ni lo vio venir.

- No esperaba confesarle mí amor - me dijo jugando con sus dedos - fue un impulso, porque ese chico intentó besarlo y yo lo aparte, gritando como idiota "¡Baek es mío!"

- Chan - reí - sí que eres un idiota.

- Fue un impulso, ya te lo dije... -

- Y como se llama -

- Kim MinSeok - murmuró.

La melancolía en su voz se hizo cada vez más notoria con el pasar de las horas. Nos quedamos ahí hasta las 8:00 p.m.
El local ya cerraba, y el dueño no tuvo más remedio que sacarnos.

- Espero volverlos a ver - nos dijo - un verdadero gusto haberte conocido, KyungSoo.

- Lo mismo digo - sonreí.

- Avísame cualquier cosa - añadió.

- Esta bien, gracias por todo -

Y volvimos a caminar.
ChanYeol se aferró a mí brazo.

- ¿Qué crees que haces? - pregunté, extrañado.

- Lo siento, cuando me sentía triste, BaekHyung solía dejarme tomar su brazo y ahora...

- Nah, olvídalo - lo interrumpí - dejalo así.

.
.
.

ChanYeo, se quedó a dormir en mí cama.
Me quedé en la sala, terminando una tarea mientras comía papitas de una funda. La lata de CocaCola estaba a mí lado, dejandome beberla sorbo a sorbo.

Y el tímbre de la casa sonó.

- ¿Quién es ahora? - me levanté y la abrí - ¿SeHun?

- A-Ayudame Soo - murmuró totalmente más pálido de lo normal.

- ¿Qué pasó? -

- TaeMin y JongIn se están matando abajo -

- ¡¿QUÉ!? -

Bajé corriendo, casi volando en las escaleras. Abrí la puerta principal tan solo para encontrar a Lee encima de Kim, golpeandolo una y otra vez.

- ¡Soo! - asentí.

Me acerqué y jalé con todas mis fuerzas del chico.
Lo empujé y me subí sobre él, mostrando mí lado más salvaje.

- ¡¿Qué crees que haces!? ¡es tú novio! -

- ¡Ya no lo quiero! - bufó - ¡solo piensa en ti!

- ¿Cómo? - detuve mí pueño antes de llegar a su cara.

- ¡Si! - me empujó y se levantó - regresamos...¿y de qué me sirve? ¡solo vive pensando en ti! ¡cada palabra se su boca es tú nombre! ¡quedatelo! Yo ya me harté de él...

Y se alejó.
Yo me apresuré y sostuve a JongIn, que estaba completamente borracho. Se deslizaba por los hombros de SeHun, quien me ayudó a subirlo hasta mí departamento y ponerlo en mí sillón.

- Gracias... - murmuré.

- De nada - me miró - Soo...¿sabes que le pasa a LuHan? Me ha evitado a toda costa estos días.

- Es que no le has contado de tu novio o novia -  solté sin pensarlo mucho. Y se rió.

- Yo no tengo novio - sonrió - en quien pensaba es en él - casi me atoro.

- ¿O sea que quieres a LuHan? -

- Claro - caminó a la salida.

- Entonces vé y buscalo, aclaren todo - sugerí.

- Eso es lo que haré, gracias Soo, adiós -

Cerró la puerta tras suyo, y yo me acerqué hacia JongIn, tapandolo con una cobija mientras le acariciaba el pelo.

- Tonto Nini - murmuré - descansa.

Pensaba alejarme cuando su mano me jaló y su brazo me envolvió en su pecho.

- No te vayas - susurró - por favor, Soo, cura mí corazón herído hoy...

- ¿De qué hablas? -

- Quedate conmigo - insistió y sus párpados se abrieron - por esta noche, sé mí consuelo.

- Kai, soy tú amigo, soy tú consuelo - me dolió decir eso.

- No seas mí amigo esta noche - me observó.

- ¿Cómo? -

- Soo - se alevantó - me gustas.

- Estas borracho - comenté.

- De tú amor - me tomó del rostro.

- Lo olvidarás todo mañana -

- Mentira - se acercó a mí - Soo, me gustas. Y me di cuenta mientras TaeMin me golpeaba: me gustas, me gustas, me gustas.

- Kai yo-

- Y sé que también te gusto - me sonrojé.

Fue cuando me besó, delicadamente, y una arrollo de emociones casi me mata.
Me sentía alegre y a la vez triste.

Porque podía ser un bonito sueños.
O que mañana lo olvidara todo.