Epílogo

6.7K 783 166
                                    

Se volvió a observar al espejo y suspiró suavemente. Su padre hacía las clases cada día más pesadas y su pobre cuerpo de diecisiete años apenas podía con todo ello. Haber nacido para ser rey debía ser, sin dudas, el destino más difícil de afrontar.

—Estás a segundos de partir el espejo con tu mirada.

Volteó con el ceño fruncido y apuntó al menor con un dedo.

—Fácil burlarse si no debes pasar por lo mismo.

Junhyung subió los hombros y rió.

—Nosotros los omega debemos mantener nuestro lugar junto a nuestros alfas. Heredar el trono no es para mí —afirmó, con un tono sabiondo, antes de lanzar una carcajada.

Yeonjun bufó y lo golpeó en un brazo.

—Claro, para las responsabilidades eres un dulce omega que no mataría a una mosca, pero para pedir derechos eres peor que un alfa.

—Se hace lo que se puede para sobrevivir, mi querido hermano —se burló.

Pronto, unos golpes apresurados se oyeron en la puerta.

—¡Vamos! ¡Apúrense!

—¡¿Cuánto piensan tardar?!

Yeonjun se tapó los oídos con las manos y jadeó con un gesto sufrido.

—Dioses, denme fuerza —suplicó.

Junhyung rió. Por supuesto que lo hizo. Todos los omegas de aquella familia tenían el increíble hábito de gritar en cada momento que pudieran. Sus hermanas no eran la excepción.

—Vamos —dijo esta vez Haneul, golpeando la puerta con más suavidad—. Ya es hora. Los invitados esperan.

—Esto se hace así —una voz más profunda resonó por el lugar.

Pronto, Soobin estaba entrando a la habitación.

Junhyung corrió hacia su hermano y prácticamente se le colgó de un brazo, casi suplicando perdón por la tardanza.

—Ha sido culpa de Yeonjun —murmuró, con tono malicioso.

—Traidor —gruñó Yeonjun, en voz baja.

Kai se apoyó contra el marco de la puerta y lanzó un suspiro cansado. Para ser el menor de los hermanos, era un jovencito bastante alto y apuesto. Su entera presencia reflejaba los rasgos de un dulce alfa, a pesar de aún no haberse presentado.

—Appa está casi hirviendo en furia —afirmó—. ¿Qué les está tomando tanto?

—Yeonjun está sufriendo la "crisis del rey" —bromeó Junhyung.

—Vamos, basta de juegos —Soobin suspiró y se acercó a Yeonjun para acomodarle la capa—. Así estás más que bien, deja de poner presión sobre tu espalda. Nuestro padre sólo espera que tengas conversaciones casuales con algunos invitados, no que des un discurso motivacional.

—Exacto —afirmó Kai, con convicción—. Además, si se apresuran, ya no tendré que sufrir solo el griterío de nuestras hermanas. Haneul es la única que parece mínimamente compuesta.

—Eso es porque ya se ha casado —dijo Junhyung, con simpleza—. No creas que no estoy ansioso por todos los alfa que habrá en la fiesta —dijo, con tono divertido—. Sólo que tengo suficiente clase para contener la emoción.

Soobin rodó los ojos y sujetó a ambos hermanos por la muñeca.

—Basta de charla. Abajo, ahora.

No había mucho que pudieran hacer ante las palabras de su hermano. Pudiera que él no estuviera destinado al trono, pero siempre sería un gobernante. Además de, sin dudas, contar con la presencia imponente de su padre.

His [Adaptación Namgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora