VI Dolor

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Las gotas de agua caían desde el Cielo gris que nos rodeaba abrazándonos de un ambiente triste y lleno de melancolía.
El padre de Cloe Vincent daba las palabras de agradecimiento por haber asistido al sepelio de su amada hija. Sus lágrimas eran algo Inevitable y su voz se cortaba y se ahogaba dentro de un sollozo cada vez que pronunciaba el nombre de aquella chica cuál sonrisa nunca jamás íbamos a volver a presenciar.

Jardix estaba a su lado parado con las manos tomadas por su espalda. Llevaba puestos lentes de sol, seguramente para disimular el color sangre de sus ojos de tanto llorar, era una cualidad que recordaba de él, cuando Jardix lloraba sus ojos parecían que iban a explotar y se tornaban color rojo muy fuerte, como si hubiese consumido alguna droga.

Frente a ellos estaba la pobre Cloe descansando dentro de un ataúd en el cual encima de él habían muchas rosas, fotos, detalles que sus amigos y familia habían puesto sobre él. La madre no estaba presente por que estaba hospitalizada. La noticia hizo que tuviera unos grandes ataques y por fortuna no había sufrido un infarto.

Ya habían pasado dos días desde aquella noche. Y desde entonces no había hablado con Eloísa ni con Clay. Prometimos no decirle nada a Janneth así que con ella debía actuar de lo más normal.

-Esto apesta...

Sobresalté al escuchar una voz muy familiar que posó sobre mi oído derecho.

-¿Puedes no aparecerte como si alma en pena?

-lo siento. Y siento no haberte llamado pero, han sucedido cosas estos últimos días...

Me giré para tener una mejor percepción de lo que estaba presenciando.

-¿Qué tipo de cosas?

-los gemelos fueron a mi casa.

Eso me paralizó.

-no hablemos aquí Clay. Te veré en la salida luego de que esto termine.

Clay asintió y volvió al lugar donde había estado desde el principio del acto fúnebre.

Cuando terminaron de dar los monólogos llegó la hora más triste para todo ser cercano a Cloe. Cuando la caja empezó a ser introducida en el panteón escuché como el padre se derrumbaba en llanto y desesperación

-¡por favor hija, no nos dejes, tenías tanta vida por delante!

Lloraba y gemía, debían sostenerlo entre cuatro hombres más y era una escena desgarradora. Amigos, familia y personas cercanas, le daban unas ultimas lágrimas de despedida a quien en vida fue Cloe Vincent, la niña sonrisa.

Cuando todo estaba por terminar quise buscar a Jardix para expresarle mis condolencias, lo había visto en el velorio pero estaba tan impactada por lo que pasó la noche en que murió, que no pude acercarme a él sin tener una escena de pánico.

Busqué con mi vista por todo el cementerio y no pude verlo en ninguna parte.

De repente vi su silueta, estaja sentado en las gradas de una cancha de basquetboll en frente del cementerio. Le dije a mi madre que me regresaría con Clay a casa y ella accedió. Me despedí de ella y de mi padre y fui directo pero en dirección a mi ex novio.

Dudé un minuto en interrumpir su ensimismamiento pero quería y extrañaba escuchar su vos una vez más. Lo nuestro fue algo muy fuerte para ambos y no se olvida de la noche a la mañana. Me dirigí hacia él algo indecisa pero ya era tarde para arrepentirme. Ya había mencionado su nombre en alto para que supiera que estaba justo a su lado.

-¿sabes?, el próximo año iría a vivir conmigo, iríamos juntos a la universidad. - soltó sin dejar de ver hacia la nada y su voz se ahogó en un sollozo.

TENTACIÓN (SEDUCCIÓN MORTAL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora