10.

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Emilio.

Mientras bajaba no quitaba mi mano del lugar donde Joaquín me había dado el beso,al centir sus labios rozar con mi piel,me hacía sentir bien tanto que mi piel se erizaba.

—Emilio,buenos días — antes de que pisará el último escalón la madre de  Joaco me habló,traía una toalla en la cabeza por lo que supuse que estaba en el baño.

—Buenos días señora.—extendí mi mano para saludar.

—Ya te dije que me digas Eli,no hay problema con eso.-tomo mi mano para saludar — bien te dejo,mi hijo ya te está esperando en la cocina- no dijo más y se fue.

Seguí mi rumbo y efectivamente Joaquín ya me estaba esperando con dos platos en la mesa acompañados con dos vasos servidos de jugó el sabor era de naranja,había hecho huevo con jamón,pero aunque fuera solo eso olía muy bien.

—Por fin,pensé que te habías dormido otra vez — dijo dejando su celular aún lado para mirarme — anda que esto se enfría.

Joaquín

Mientras comíamos no pude evitar mirar a emilio,el también lo hacía en su mirada se reflejaba algo nuevo,sus ojos se dilataban cuando me miraban,daban un brillo tan único,ese brillo de cuando estás enamorado,¿Será posible? No Joaquín claro que no,el solo es tu amigo y es hetero.

El sueño que tuve me hacía sonreír demasiado me gustaba pensar qué tal vez no es tan hetero como el dice,me encanta engañarme,pero encerio fue lo mejor que pude haber soñado.

—¿Por que esa risa? —Se me había salido  una risa, rayos,Emilio me miraba y entre sus labios había una pequeña sonrisa.

—Ah es que me acorde de algo,nada importante — espere que me creyera y así fue ya que solo asintió.

Tan pronto terminamos de comer,el me quiso ayudar a lavar los trastes,insistí en que no pero bueno emilio es muy necio y nadie lo saca de ahí.

—Ya termine,así que ya me iré tal vez mi madre este ya en México y no quiero tener problemas con ella,aparte ya fui demaciado estorbo  — Emilio sonaba un poco raro el día de hoy pero bueno creo que tiene razón,no en el centido de estorbó el jamás será eso,pero lo digo por lo de su mamá así que es mejor que se vaya de una vez.

Lo acompañe asta la puerta y antes de que se fuera quería decirle algo sobre lo que pasó con su papá,no quiero que esté mal durante este tiempo que no nos veremos ya que como quien dice soy el único al que le cuenta todo.

— Emilio — el voltio a verme — se que no es mi problema pero me permites darte un consejo.

— Claro dime Joaquín — metió sus manos al bolsillo de su pantalón y me miró.

— Habla con tu mamá sobre lo que pasó ella entenderá,las mamás son las mejores,las únicas que nos entienden,sabrá que hacer vale - el taxi ya había llegado así que emilio ya está en la banqueta.

—Lo haré,lo prometo, gracias Joaco te quiero— no dijo más y se fue.


3 semanas después...

Narrador homónimo.

3 semanas ya habías pasado,las cuales an sido un poco difíciles para nuestros protagonistas,nuestros pequeños an estado al corriente con sus estudios,pero apezar de tener la mente tan ocupada no pueden dejar de extrañarse,extrañan la compañía del otro,su esencia,emilio no sabe bien lo que siente,an sido semanas de sentimiento encontrados para el,aún siente el roce del labio de el pequeño,se pregunta por qué sigue soñando con el,por que ese sentimiento de necesidad al querer ir asta su casa y abrazarlo,¡hay emilio,emilio!

Manos multicolor [ᴇᴍɪʟɪᴀᴄᴏ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora