Capitulo siete.

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-Se una dama y llevame a mi departamento.

-Que te vallas a la mierda, te eh dicho.

-Creí que eras una dama.

Ella lo miro mal y salío del coche, cerrando la puerta fuertemente. Habían conducido como por quince minutos, dando muchos giros ya que siguio las indicaciones de Michael. Mala idea numero dos. Ademas en todo el camino, este se la paso tocando su guitarra tratando de cantar la versión original de Madness, no le importo si sus oídos sangraban o no. Ademas, había modificado unas partes de la letra para, practicamente, insultarla. Osea, ni siquiera por que estaba haciendo el favor de llevarlo a su jodido departamento en su jodido auto. Joder.

Abrío la puerta de Michael y este estaba empezando a tocar un riff con su guitarra electrica, conectada a un mini amplificador que se encontraba colgando en su cinturón.

-Espero que un día de estos, esa cosa se queme.- dijo mientras lo ayudaba a salir del carro.

-Acepto tus buenos deseos. Ahora, llevame hasta mi departamento.

-Que no, coño. Además yo tengo que ir a mi casa y ya es tarde.

-Una razón más para que me lleves hasta mi departamento. Si lo haces, te podría dejar quedarte a dormir ahí.

-No-oh. Mala idea numero tres. Ademas, no confío en que no trates de aprovecharte de mi.

-¿Que? Oh, vamos.- ella lo miro arqueando una ceja-. Bien, esta bien, eres una chica lista.

-Mira, esto es lo que haremos: te ayudar a subir hasta tu departamento y ahi llamare a un taxi, entonces ire a mi casa.

-Esta bien...- dijo alrgando las palabras-. Ahora ayuda a un discapacitado.

El edificio donde vivía Michael era de ladrillos, se estaba despitando y parecía muy descuidado. Michael abrío la puerta del portal y entraron. Había un ascensor y una mesa de recepción vacía. Caminaron hasta al ascensor que chirro mientras bajaba lentamente. Cuando llego, las puertas se abrieron con otro chirrido, como si estuvieran llorando. Ella llevaba la guitarra acustica de Michael y el la electrica. Se había apoyado en una esquina del elevador despues de haber presionado el boton del piso y ahora le sonreía, pero ella, dulce como siempre, le enseño el dedo medio y articulo un "te odio."

Cuando el elevador se volvio a abrí otra vez, en el cuarto piso, Nirvanna pudo notar como el piso estaba cubierto de alfombra roja. Y que apestaba a tienda de mascotas. Michael se aparto en ella y, cogiando, camino junto a ella, guiandola, hacia su departamento. Abrío con las llaves y se arrojo a lo más cercano que encotro que, para su suerto, fue un sillón.

-El telefono esta por ahí.- dijo señalando una mesa llena de platos con cereal, mientras prendia el televisor con el control a distancia. Lo descolgo y lo puso en su oído.

-Umm, Michael, no tienen señal.- pudo notar como una inevitable sonrisilla le crecía en los labios.- Oh, vete a la mierda.

N/A Okey... La televisión se acaba de prender en un video de Rammstein, ¿coincidencia? No lo creo. Pero si me dio miedo por que es de noche. Ayuda. Morfeo ven a mi por favor.

Target heart | Michael Clifford | The Cupid Officies Series num.3 | TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora