Cenizas & Papel

Años.

Los años no vienen solos dicen por ahí.
Vienen con algo o muchas cosas. Pero nunca con nada. Siempre te dejan algo.
Algo bueno. Algo malo.
Una enseñanza. Una lucha. Un error.
Te presentan nuevos corazones,fugaces o no.
Traen oscuridad y luz a la vez, o turnados.
Traen toda la mezcla de colores.
Un arcoiris y un cielo gris.
Traen un invierno feroz,y un verano feliz.
Traen monotonía y rutina. A la vez que rompen la zona de confort.
Traen un sin fin de problemas,y un sin fin de soluciones.
Traen comida y hambre.
Traen agua y sed.
Todo lo que te pueda dejar a su merced.
A la del tiempo.
Porque lo mínimo que traen es aquel infinito y a la vez tan corto que se va tan rápido pero ahí esta.
El tiempo.
Los años no vienen solos,dicen por ahí.
Dicen por ahí que vienen con desgracia y muerte,tanto como con felicidad y nacimiento.
Que escuchas más allá del viento,si despertas.
Pero antes debes de ver,que tal estás.
Los años vienen,esa es la realidad. Solos jamás. Sino con su principal compañero tiempo, al que tienen como tan poderoso y temible, pero le reservan la tarea de curar. O eso dicen no?
El tiempo cura.
Entonces,los años curan?
Y por lo tanto los años vendrían con más que compañía,con situaciones que abrirían... el paso,el camino, el sentimiento y las heridas.
Pero aquellas sanan,sólo dejan huellas pero sanan.
Entonces, diría yo. Los años pueden ser tan poderosos,porque el poder se los da uno mismo.
Tan constructivos y destructivos.
Los años pasan,esa es la realidad.
No importa lo que se diga.

17/7/19