N A T U R A L (HopeMin) Two-shot

Segunda parte

Ya había pasado un mes desde que JiMin había confesado su amor por HoSeok, pero éste lo evitaba a toda costa.

El menor se sentía culpable, ya que no debió decir nada, y menos frente a más de veinte personas.

Le dolía demasiado el saber que HoSeok no sentía lo mismo por él, pero ese es el riesgo que corría al confesarse. A pesar de eso, JiMin no se arrepentia en lo absoluto, al contrario, sintió como si se hubiera quitado un peso de encima.

Bueno, no tanto.

Ya que sus sentimientos por HoSeok no cambiarían.

Pero esta vez sería diferente, JiMin dejaría su cobardía y hablaría con HoSeok, si él no sentía nada por él era mejor que lo dejara claro y ya.

Aunque su indiferencia lo demostraba un poco.

JiMin camina por los largos pasillos buscando con la mirada a HoSeok.

Y lo vio, tan guapo como siempre, charlando con uno de sus amigos.

JiMin carraspea antes de hablar.- HoSeok, será qué, ¿podemos hablar?.- El mayor asiente y se despide de su amigo.

- ¿Qué ocurre?

- Mmm... yo, quisiera pedirte disculpas por haberte humillado frente a todos, créeme que no era mi intención yo so-

Las palabras del menor quedan atascadas en la boca de HoSeok, la cual se impacto fuertemente con sus labios.

Al principio JiMin no siguió el beso por la sorpresa, pero al sentir la lengua de Jung querer poseer su boca, cedió.

¡Dios! Había soñado tanto con ese momento.

- No tengo nada que disculparte, JiMin, al contrario, perdóname tú a mi por haberte evitado por este último mes.- El mayor suelta un gran suspiro.- Yo también estoy enamorado de ti, JiMin, ya no lo puedo callar más.

Y ese queridos amigos, fue el puto día más feliz de Park JiMin.

Los primeros meses en la nueva relación fueron tímidos, con simples besos inocentes y pequeñas caricias sin segundas intenciones.

Y eso estaba bien, ambos querían llevar las cosas en calma, disfrutar su compañía y conocerse mejor.

Pero esta vez era diferente, la inocencia en sus toques se desvío y ahora el calor reinaba en sus cuerpos, y se sentía realmente bien que a ninguno de los dos les importaba parar.

- Vamos, JiMin, dime que pare...- El nombrado suelta un gemido ahogado en los labios de HoSeok, pasa su lengua por esos hinchados labios que lleva besando más de cinco minutos y después niega.

- No, no quiero que pares, quiero entregarme a ti, te necesito, Hobi...

Y eso es todo lo que el mayor necesitaba para tomar a JiMin en ese maldito callejón oscuro, sin importarle una mierda que alguien pudiera verlos.

HoSeok también lo necesitaba, necesitaba de JiMin tanto como el menor lo necesitaba a él.

De un rápido movimiento los pantalones de JiMin fueron bajados hasta sus rodillas dejando al aire su trasero.

HoSeok tomo entre sus manos el culo del menor y paso su lengua por la entrada de éste, erizando su piel por completo.

JiMin gemia por lo bajo, reprimiendo sus ganas de gritar una y otra vez el nombre de HoSeok.

Sin previo aviso dos largos dedos del mayor se depositaron dentro suyo, ocasionando que un pequeño grito de sorpresa saliera de su garganta.

- Ahh, Hobi...- Los dedos del mayor comenzaron a moverse dentro, otorgándole placer por lo largos que eran.

La entrada de JiMin apretaba tan bien sus dedos que HoSeok ya ansiaba que lo que apretara fuera su polla.

La cuál ya esta lo suficientemente despierta.

Cuando JiMin ya estaba los suficiente preparado HoSeok saco sus dedos, dejando un vacío en el menor. Saco un condón de su cartera y bajo sus pantalones junto a su ropa interior, liberando su miembro.

JiMin jadea al sentir el pene de HoSeok en su entrada, la cual finalmente entra, tan malditamente delicioso.

Los gemidos en ese oscuro callejón no se hicieron esperar, HoSeok comenzó a embestir como una bestia, sin importarle donde estaban, sin tener consideración alguna con él.

Y le encantaba, era simplemente fascinante, como siempre fantaseo.

Las manos de HoSeok tomaban con fuerzas sus caderas, mientras que gemidos bajos salían de su boca.

Y sí, definitivamente Jung HoSeok era el indicado.