Capítulo 71: Purga

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Arco de asesinato

Purga

Eres demasiado indulgente".

¿No puedes venir con algo nuevo, Danzo?" llegó la cansada respuesta.

Él es el jinchūriki de Konohagakure, Hiruzen. Permitiendo que el Hyūga tome el control de-"

¿Crees que los Hyūga controlan a Naruto?" Sarutobi Hiruzen sonrió como si Danzo acabara de hacer una buena broma. "Estás muy equivocado, Danzo. Ese niño ... su generación pronto se levantará para tomar los lugares que le corresponden en esta aldea, y él más que ninguno de los otros tiene la llave del futuro".

Él es un arma".

Y es por eso que no puedes ver, Danzo, cuán intensamente arde la voluntad del fuego. Incluso después de todos estos años, todavía no has entendido realmente las enseñanzas de Tobirama-sensei".

Maldición, realmente me siento culpable por hacerle esto a Anko. Espero que Erokage no sea demasiado duro con ella, ' Naruto realmente no se sentía demasiado feliz por noquear a una mujer que realmente había crecido con él. Era una encarnación del caos, con tendencias sádicas que podrían, casi, darle al Kyūbi una carrera por su dinero (proverbial). Y sin embargo, él le hizo esto, sabiendo que a la gente ya no le gustaba debido a su pasado como estudiante y sujeto de prueba de Orochimaru ...

"Ciclo de odio ... todas estas personas solo contribuyen a ello, ¿cómo piensa Erokage terminar con esto?" murmuró para sí mismo. Ignoró la voz quejumbrosa en la parte posterior de su cabeza que le dijo que él también contribuyó al ciclo. "Hirieron a Hinata-chan. Al diablo con el ciclo".

¿Sabes con certeza que fue Danzo quien orquestó esto?" era algo que Anko le había preguntado. La pregunta creó solo una pequeña cantidad de duda en su cabeza.

"Tiene que ser Danzo. Ese tipo raíz dijo que un segundo equipo estaba en movimiento. Todo encaja perfectamente. Estoy seguro de que el viejo bastardo aparecerá con su cara engreída, sugiriendo al consejo que me entreguen a él para el entrenamiento emocional ", Naruto sacudió la cabeza. "Todo es tan obvio. Demasiado obvio. Los otros clanes deberían poder verlo, ¿verdad? ¿O están todos demasiado cegados por ser un jinchūriki?"

Naruto seguramente esperaba que no trataran de torturar al clon que había dejado en la cárcel. Si descubrían que él había estallado, todos se interpondrían en su camino. No podía tener eso.

"No voy a parar. No esta vez. Danzo tiene que ser erradicado. Él y su grupo solo esparcen dolor", frunció el ceño Naruto. "Ni siquiera me importa tanto que me encarcelen. Lo que le pasó a Hitomi-sama es lo importante. Cruzó la línea".

Además, cualquier evidencia que pueda encontrar en el escondite de Danzo solo se declararía a su favor. Y si no encontraba nada ... bueno, no le importa demasiado lo que sucedería después. Estaba demasiado enojado para pensar en las consecuencias. Todas las consecuencias menos una.

"Solo espero que ella me crea", murmuró Naruto con tristeza ardiendo en su corazón. "No lo hice ... nunca lastimaría a Hitomi-sama ... no, ella lo sabe. Tiene que hacerlo. Es más sabia que yo. Tengo que creer eso".

Creó clones.

"Por Hinata-chan".

"Para Hinata-chan", Naruto golpeó los puños con ellos, antes de que cada uno desapareciera en sus direcciones separadas. La caza había comenzado.

"Pareces bastante inquieto", la entidad que actualmente se llamaba a sí misma 'Uzumaki Ryōta' caminó con calma hacia la jaula en la que estaba el demonio de nueve colas. La ira de Naruto afectó a su mundo interior haciendo que sea bastante imposible estar "afuera". Entonces Ryōta había bajado la escalera de caracol dentro del templo para visitar al único otro habitante de este mundo vacío. Malhumorado como puede ser, el Kyūbi fue mejor compañía que las feroces tormentas eléctricas que azotaron el mundo interior de Uzumaki Naruto.

El invitado de honorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora