5. ¡Agarrale la mano a ella!

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La novia de Jungkook le caía en el hígado, siempre estaba con él en la prepa, todo el tiempo, Jimin no le podía decir absolutamente nada, por que Jungkook lo había amenazado con dejarle de hablar. Así que allí estaba recargado en la esquina de la pared de la prepa cuando kook estaba despidiéndose de ella a punta de besos en el estacionamiento. Ya llevaban dos meses de noviazgo y Jimin crispaba de rabia.

- Vámonos Mochi.

Jimin ya no dejaba que él susodicho le tomara la mano. Ahora se la guardaba de ese hombre infiel y traicionero.

- Te gustaría que viéramos una película.

Jimin no quería nada, nada absolutamente nada de él.

- No lo sé.

Jungkook le pidió la mano extendiendo la suya pero Jimin se negó.

- Me harás que te ruege de nuevo para que me des la mano.

Jimin lo miro por el rabillo del ojo y asintió.

- Mochi me podrías perdonar por tener una novia, se que te molestas por que gustas de mi, pero estoy tan acostumbrado a caminar de tu mano asi que si no la agarro en este mismo instante me moriré, ten piedad y salvame de una muerte inminente.

Jimin fingió piedad saco su manita y la tendió y él la agarro triunfante.

Esa tontería se la había inventado Kook para que él accediera, por que para la mayoría de todo Jimin ya no tenía disponibilidad para el.

- ¿Y la película?

- Esta bien solo por que no tengo nada que hacer.

- Eres muy cruel.

Jimin jalo su mano pero Jungkook se retractó de sus palabras.

.

Se encontraban en la sala de la casa de Jungkook, estaban viendo la última película de Harry Potter. La sra Jeon estaba sentada en uno de los sillones y en otro se encontraba Jimin sentado y Kook recostado en sus piernas, Jimin acariciaba su cabello. Lo normal.

Algo alteró la armoniosa paz, tocaron el timbre y la sra fue a abrir. Una voz femenina se escuchó preguntando por Jungkook.

Chungha la hermosa novia de Jungkook se asomó viendo extraño como estaban acomodados. El susodicho se levantó y fue con ella dejando a Jimin sentado, solo y desolado.

- ¿Te duele algo Jimin? - Jimin se sobaba las sienes, en serio esa muchacha no sabía que había horarios, ahora mismo era el tiempo de Jungkook para Jimin. ¡Que falta de respeto!

- Si, me duele un poco la cabeza - Mejor iré a mi casa y le hablaré a mi madre. - Me despide de Kook. - Revisó que los noviecillos se habían ido a la recámara de Jungkook, salio de la casa caminando muy enojado. Odiaba a esa chica con todo su corazón.

No se quería hacer a la idea de lo que harían allí solos, pero Jungkook ya casi cumplía 17 años así que ya no era un niño ya y ella no era precisamente inocente, más bien era la personificación del demonio. Según la valoración objetiva de Tae y Jimin.

Lloró de coraje, cuando llego a su casa solo se fue a dormir directamente. Ya no quería saber nada del amor por ese día.

.

- ¡¿Como puedes soportar ver eso?!

Tae estaba a su lado, estaban sentados en el pasto, lejos de la cafetería.

- No me duele.

- Tu si que eres masoquista, guacala, toda la lengua le mete.

Jimin miraba la escena de los noviecillos. Casi era Julio, se terminaba el curso, y el baile de fin de curso era inminente, todos estaban emocionados pero Jimin no, ni los novios por que estaban sumergidos en la burbuja del amor.

I miss you Donde viven las historias. Descúbrelo ahora