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—¿Entonces la besaste y ya?

Me encontraba con mi hermano esa tarde, normalmente no le contaría sobre mi cita tomando en cuenta que él fue una de las víctimas del pulso, pero él notó algo extraño en mi rostro, como la mirada pérdida de alguien que está (demasiado) en otro lugar. Al final acabó sacándome la historia de mi cita con Nica.

Después del beso salimos de la cueva un rato y cada uno de nosotros se fue a su casa, ella pagó mi taxi, por lo que me sentí como un mal novio, si es que yo fuera su novio o algo parecido, no quedó claro. ¡Carajo! Mi primer beso fue con una chica que no era mi novia, al menos Nica tuvo su primera vez con su pareja, pero yo no tengo ese tipo de excusas que usar a mi favor.

—Tampoco es que yo buscara algo específico en esa cita.

—Sí tú como no, una chica que te lleva a una cueva oculta en un bosque no planea nada más allá de un beso.

—En mi mundo sí.

—¿Qué es ese mundo, Peyton? –mi hermano tiene cierto gusto por llamarme por mi apellido cuando se pone serio, debido a que sus amigos suelen hacer eso con él–. Max, lo del pulso sacudió al mundo y ahora le falta algo de amor o de romance. Y Nica parece estar diseñada específicamente para cumplir ese rol, quizá deberías aprovecharlo.

—¿Aprovecharme de ella?

—No de ella, sino con ella –se sienta a mi lado, se siente bien que lo del pulso no le haya afectado lo suficiente como para volverlo alguien más frio, sino todo lo contrario, creo que es la única persona que he visto que se comporta de esa manera–. Pueden salir juntos, quizá después del pulso, no es bueno contar dinero delante de los pobres.

—Lo hago contigo.

—Sí, pero yo ya he aceptado la realidad, me despierto, desayuno algo y finalmente voy a llevarle rosas a su tumba. Intento vivir de manera normal, es lo que ella hubiera querido.

—¿Tú crees?

—Sí te soy honesto ya estaba preparado –escucharlo decir eso me hace sentir algo inquieto, como si el ambiente se hubiera puesto más ominoso–. Jenny no estaba bien, tenía ciertos problemas en su vida que yo no podía resolver. Tomaba medicamentos, más de una vez me dijo que si ella moría mi trabajo era vivir con normalidad. ¿Sabes? Es lo mejor que ella hubiera muerto y yo no, ella no estaba lista para este mundo que acaba de surgir. ¿Te imaginas la carga de consciencia del superviviente? Eso la destrozaría.

Me pregunto si él no carga con esa consciencia del superviviente.

—Es una forma de verlo, supongo.

—Lo es, pero recuerda esto, hermanito. Lo que prende rápido se apaga rápido.

—¿A qué te refieres?

—Tómatelo con calma. La vida no es una novela romántica donde conoces a una chica y sienten un amor increíble, se pelean y después se reconcilian en una carrera al aeropuerto. No le muestres enseguida la mejor cara de Max Peyton. Y tampoco te encapriches, habrá momentos donde lo que te guste de Nica esté ausente. Ella no es un ser unidimensional que siempre estará ahí para hacerte sentir mejor. A veces Nica dejará de ser la chica de la que te enamoraste y debes aceptarla cuando eso suceda.

—No estoy listo para esto y lo haces sonar como si tuviera que desactivar una bomba.

—Si ella se enoja, sí.

—Nunca he tenido una relación con una chica.

—¿Eso quiere decir que con un chico sí?

—¡Tampoco! –a veces él puede ser un poco extraño en la manera en la que se comporta, es mi hermano, después de todo. Ya me he acostumbrado.

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⏰ Última actualización: Oct 15, 2019 ⏰

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La Muerte de Todas las Cosas BellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora