O1.

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Cambio.

Sí, hoy Rosseane optó por cambiar su habitual maquillaje: su color de labial pasó de ser un coral a uno color rojo intenso.
Es un gran cambio, se diferencia a distancia de las demás chicas, que como costumbre, en Corea suelen tener un aspecto más femenino y suave, todo lo contrario a ella.

Su outfit está listo para salir.
Una falda tableada color gris, un chaleco corto color rojo y unos tacos negros.
Así suele ser su armario.
Faldas y colores intensos.
Nada de rosa, solo un pijama que le envió su madre vía correo desde Australia, pero ese es color baby pink, no rosa normal.

Baja de su habitación y como costumbre, desayuna tan solo un vaso de jugo, que si come algo en la mañana, por la tarde le caerá mal.
Se le es raro, pues su cuerpo no está acostumbrado a comer sanamente, pero aún así es uno de los más admirados de la universidad.

Con su equipamento de universitaria ya listo en su bolso, el chofer le toca la bocina anunciando que ha llegado y que ya es hora de emprender camino a la universidad, la que le parece un infierno, pero con buen nivel educacional.

...

- Mira su falda, ¿no será muy corta?

- Se ve como una zorra con ese labial.

- Mira sus piernas, agh, que envidia.

- Si tuviera la oportunidad de     hablarle, seguro me desmayo.

- ¿Alguien a logrado conseguir su
   número?

Comentarios comienzan a salir de la gente al primer paso de Rosseane en el recinto, como era de esperar.
La chica está completamente consciente que genera envidia, admiración y que caiga baba de la boca de muchos, pero eso no es lo que ella quiere ni menos lo que pretende.

Ella está acá solo por una razón, estudios y nada más.

Al día mucha gente le habla, pero tan solo ignora mensajes, pues cualquier tipo de distracción puede arriesgar su rendimiento, y consecuentemente, más tiempo en la incómoda Corea.

Camina por los pasillos con los constantes comentarios, hasta llegar a su locker. En este, saca los cuadernos de la asignatura correspondiente a la hora.

Examina materia para hacer tiempo, pues faltan unos minutos para que comienze la jornada, pero entre esos minutos, se percata de un cambio en el ambiente.

Cambio.

La gente ya no está hablando de ella, la gente se da vuelta y sus ojos ahora se posaron en otra rubia que está entrando de la misma manera altanera que Rosé entró hoy.

Comentarios comienzan a salir.

- ¿La ves? Mira sus ojos, que lindos.

- Wow, ¿es nueva? Quiero tener su
  estilo.

- Es tan guapa, Dios, me conseguiré su
  número lo más pronto posible.

- Se le ve confiada, ¿no que es nueva?
  Tss, ya quisiera yo ser nueva y tener
  esa actitud.

¿Qué dicen de ella? ¿Que es guapa? ¿Confiada?

Cierra de un golpe su cuaderno y luego de también cerrar su locker, se voltea hacia donde la mayoría de las miradas están centradas.

Allí está, un rostro nuevo, uno para nada conocido en el lugar pero que a pesar de eso, irradia luz y confianza.
Es guapa, no lo negará.

La analiza.

¿Cómo es que a penas entró logró tener tanta atención de todos?
Ya mucha gente se le acerca, se le ve sociable.
Agh, tenía que ser así.

Una mirada de disgusto sale de Rosé y tan solo ignora ese mal presentimiento que le ocasiona la nueva. Ya marcan las 9:30 y ya es hora de su primera clase del día.

Camina hacia el aula con tanta confianza como siempre y intenta olvidar lo recién ocurrido.

¿Por qué su mente le puso tanta atención? Es primera vez que sucede.
Tiene ganas de investigar sobre ella, la nueva, y lo hará.
Pero, ¿por qué tanta curiosidad?

SHE. [Chaelisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora