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la noche caía mientras que Santiago solo se quedaba mirando.

Al lado suyo estaba lima, el cual miraba con algo de confusión la puesta de sol, preguntándose por qué le había citado a ese lugar, y por qué solo estaban ellos dos y no los hermanos del chileno.

── ¿querías decirme algo?── preguntó, mientras miraba a la capital y veía como jugaba con sus dedos.

Dios, le debió pedir a viña del mar consejos antes de salir de casa.

"si tanto te cuesta, solo olvidalo."

claro, se lo decía la tipa que tuvo más de veinte enamorados y dos triángulos amorosos en dos meses.

Suspiró pesadamente, con su cara completamente colorada, para luego sacar de su mochila un ukulele, para luego sentarse al frente de lima con nerviosismo.

── yo- mph.

no podía articular una palabra, el nerviosismo lo invadía y sus manos temblaban.

❝ cálmate mino ridículo. ❞

── yo- yo quería invitarte un completo italiano-

chucha.

‧ੈ๑ Asma [TERMINADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora