El día de los paraguas negros fue el más triste que he narrado nunca.
Llovía, porque en los funerales siempre tiene que llover.
Arabella vislumbró como el cadáver de Kellin era bajado poco a poco hacia abajo.
Aunque ella sabia que él prefería ser encinerado.
Vio rosas rojas y coronas de flores blancas.
Se tocaron los violines.
Y cuando todos se fueron. Cuando Arabella echó a Erwoud de su lado.
Le cantó una de las canciones. La que habían escrito juntos.
La primera y la última.
Susurró lo que sintió en el último beso y prometió no olvidarle nunca.
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Let's kill love, but kiss me #2
RomanceSecuela de Fotografías. Empezaron a pensar en lo que tenían en común y salió la música. Una batería, una guitarra, un bajo y su voz. Así nació Let's kill love, but kiss me.