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Ahí está Yoongi, caminando por la calle arrestando sus pies, sus cabellos lacios color celeste están pegados en su frente, es más, está sudando por todo su cuerpo, incluso de partes que no sabía que sudaban; su rostro esta rojo y su cuerpo le pesa, aún le faltan como trece a diez calles para llegar a la secundaria; pero para su cansado cerebro las calles han crecido veinte metros más.

Oh Yoongi, gracias a tu expresión, todas las personas se quitan de tu camino y nadie te estorba, ahora ya sabes lo que sienten Mandy, Lucy, Helga y Spinelli cuando están molestas.

Pero son los últimos rayos de sol, ¿Quién diría que fatigaban tanto? - se relamía los labios por milésima vez. Pero Yoongi, ¿no te das cuenta? lo que te hace sudar no es el sol, es el pesado disfraz que llevas, la falta de sueño de las últimas semanas ya está cobrando factura; vamos Yoongi voltea a ver tu reflejo en esa ventana y veras esas hermosas marcas oscuras alrededor de tus ojos y el cómo rompen con la uniformidad de tu piel de porcelana. Y ustedes no le crean cuando les diga que sus ojos están rojos por el esfuerzo y el cansancio, no, sus ojos están rojos por las enormes ganas de llorar que estaba aguantando. Yoongi solo podía sentirse como un fracasado, todo le había salido mal en este tiempo. Está bien que alguna cosa que otra falles; pero que de las diez cosas que tengas que hacer en el día falles las diez, eso ya es un serio problema.

Déjenme explicarles mientras él camina en silencio para ahorrar energías. Yoongi va a participar de la obra anual, interpretando nada más y nada menos que el papel del antagónico de la historia, el gran enemigo. Este gran villano era una "gran" escarabajo humanoide (gran entre comillas porque él es el más bajo de su clase), tenía que ir disfrazado desde casa porque sabía que el tiempo no le iba alcanzar para cambiarse en camerinos, además no habría espacio ni privacidad para hacerlo. Iba caminado porque no entraba en ningún taxi y los del transporte público se reservaban el derecho de admisión. Cargaba la gran mascara en una mano y caminaba a la velocidad que el traje le permitía hacerlo.

Mierda de obra escolar, los profesores solo tienen ideas de mierda - sí, sí, sí, eso dices ahora, pero cuando escribiste tu nombre en la lista, tus pensamientos eran otros - Jimin ni siquiera me vera la cara en toda la obra, y el cabron de Jeon me dará una paliza, yo debería partirle la cara de pendejo.

Exacto, toda esta molestia es por él, por Park Jimin.

Vamos siéntense cómodas y cómodos (?) y déjenme contarles esta historia desde un comienzo, así entenderán el sufrimiento del pobre Min Yoongi y...

¡Maldito traje de mierda! - maldición, Yoongi, ya te tropezaste, debes ser más cuidados al caminar, ¿el traje está bien?, ¿no se rompió?, ¿Dónde está la máscara?, no importa cómo, pero tú debes llegar impecable y con disfraz completo a esa obra porque lo haces por Jimin, sabes que para él esto es muy importante y aunque tu papel sea estúpido, aunque la obra sea una cagada, a Jimin le importa y no quieres que falle, Jimin debe brillar, aunque tú solo seas un chiste barato.

Bien, como les iba diciendo, les voy a contar todo lo que le paso a Yoongi en este semestre. Antes, lo voy a presentar bien.

Min Yoongi es un chico de 18 años, y como ya había mencionado antes era de estatura baja, piel laida y cabellos celestes. Es algo reservado, aunque habla con todos de su clase. ¿Amigos?, solo uno, Kim Seokjin, y ni siquiera era de su clase. Seokjin siempre le estaba diciendo que es un chico muy inteligente y que siempre sabía que decir, también le repetía que era de una personalidad muy cálida y que cualquiera se siente cómodo cerca de él. Yoongi no lo veía así y nunca lo verá así; sin embargo, esos eran los únicos comentarios que le importaban, los apreciaba y le ayudaban en su percepción personal. Además de Seokjin, solo había una persona que le importaba su opinión, su compañero de clase, su gran amor platónico: Park Jimin.

Así es, Yoongi es homosexual.

Estaba tan enamorado de Jimin, que si este decía que le gustaban las personas de cabello celeste, Yoongi se lo teñía (y lo hizo); que le gustaba las orejas perforadas, él se perforaba (y lo hizo); las personas directas, él era directo (bueno eso es natural en Yoongi); los perfumes de cítricos, él los usaba (y lo hizo); las personas que no hablaban groserías, Yoongi dejaba de ser mal hablado (ahora solo se limita a decirlo en entre dientes y en su mente); las personas que se dedican a la actuación porque son valientes, él, bueno ya saben dónde está.

Él hacia cualquier cosa por Jimin, solo para que él le sonría, porque desde que conoció a Jimin, en el momento en que sus miradas se encontraron, Yoongi ya sabía que, cuando su mente este libre para pensar, lo extrañaría.

Yoongi es miembro de la orquesta de cámara de la secundaria, es encargado del piano, juega baloncesto de vez en cuando; Además de sus aficiones, Yoongi participaba en las actividades donde sabía que estaría Jimin. Debemos resaltar que lo único que realmente le importaba a Min Yoongi era Park Jimin, a tal punto que cancelaba actividades y planes de fines de semana completos, solo para poder coincidir con él.

Pero este año (su último año) había decidido entrar al club de música, después de enterarse que Jimin era miembro activo. Seokjin se había pasado tres años pidiéndole que entrara; Yoongi se rehusaba porque decía que era un desperdicio de tiempo y que no hacían nada relevante; sin embargo, descubrió que no era así, el club le había fascinado y captando toda su atención. Era otra forma de hacer música fuera de la orquesta, podía hacer rap y dejar fluir su creatividad tanto como él quería, llegando a ser coronado como el mejor MC de la secundaria.

El primer semestre le fue de maravilla, aunque se sentía algo asfixiado por tantas cosas que hacer. Iba corriendo de salón en salón cumpliendo todas sus actividades lo mejor que podía. Su pequeño ego había crecido un poco ante los comentarios de sus compañeros señalando que él era un chico fantástico por todos sus conocimientos de música, lo llamaban Genio y sus compañeros siempre buscaban sus consejos.

Y así llegamos a las vacaciones, pero no fueron vacaciones para Yoongi, había decidido entrar a un curso de piano para practicar y mejorar su técnica con las canciones que tocaría en la presentación de fin de año y así volviendo a clases ya no tendría que preocuparse por ensayar tanto con la orquesta.

- ¡Fíjate antes de cruzar, insecto! - Yoongi se paró de golpe en la acera, casi es atropellado, parpadea varias veces para convencer a sus ojos no cerrarse. La fatiga y la falta de sueño lo están haciendo desvariar. Yoongi, por favor, descansa un poco antes de seguir, esta vez te salvaste por un pelo; pero a la siguiente vez no sabemos.

Vamos Min, son solo siete cuadras más, no podemos caer - bueno, tú siempre callaste a todos diciendo que sabes lo que haces, así que sabrás como solucionar esto - no debí ponerme el esmoquin dentro del disfraz, apestare a mierda cuando me lo saque.

Así es, después de la obra, es la presentación de la orquesta y después las demostraciones del club de música. ¿Ya les había dicho que hoy era la presentación anual de cierre de curso? Bueno, lo es y, para esta ocasión, un Yoongi no alcanza.

CUCARACHINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora