I'll Never Be Your Hero

Capítulo 03: Hermanos - Parte 2

En un abrir y cerrar de ojos, el día que no deseaban, llegó. Frente a frente, dudosos, en el salón de entrenamiento, se observaban mientras que la mirada autoritaria de su padre les exigía que demostraran sus progresos.

— Inicien — Ordenó Endeavor.

Inmediatamente Shouto tomó la iniciativa. Con un moviendo de su brazo, muchos picos de hielo se aproximaron a su hermana a una velocidad vertiginosa. Ella con un movimiento similar al de su hermano, creó un espejismo del mismo ataque, terminando en una colisión entre las creaciones de hielo.

El muchacho, aprovechando el estruendo, se aproximó corriendo hacia la chica, dispuesto a empezar un combate cuerpo a cuerpo, sabía que una pelea a distancia no tendría frutos positivos para él. Al estar cerca de ella, lanzó su puño izquierdo en dirección de su hermana, siendo este bloqueado por ella, en consecuencia lanzó su derecha hacía el rostro de la chica, resultó efectivo, Lázuli dejó escapar un quejido por el golpe e inmediatamente, tratando de crear distancia, le respondió con un rodillazo hacia el estómago, pero Shouto, con una veloz reacción lo esquivó sin problemas, volviendo arremeter con su izquierda siendo esta retenida por una masa de agua, sacudió su mano tratando de zafarse del agua que empezaba a avanzar por su brazo, no lograba que ninguna gota se desprendiera de aquella masa, se alejó de ella para crear avalanchas y picos de hielo que se dirigieron hacia Lázuli.

Por su lado, la mejilla de Lázuli, dónde había golpeado Shouto, empezaba a hincharse lentamente, aunque por la adrenalina del momento, ella no lo notaba, Lázuli solo quería que Shouto peleara con todo, ambos sabían que así no podría vencerla. El don de hielo de Shouto, no podría rebatir el suyo, el cual le permitía controlar la composición química y física del agua, por ende, también el hielo que Shouto producía, y por esta razón, le fue muy simple evaporar los ataques de hielo de su hermano. Si tan solo él la tomara en serio, si él hiciera uso de la herencia de su padre, Lázuli estaba completamente segura de que quién estaría en aprietos, sería ella y eso la frustraba.

La muchacha abrió la mano derecha y sobre su palma, empezó a formarse una bola de agua que ganaba tamaño, cuando esta alcanzó las dimensiones de una pelota de básquet, la lanzó en dirección del menor quién la hizo estrellar contra un su hielo, haciendo que ésta salpique por todas partes, sin embargo, sin que Shouto se diera cuenta, estos restos agua, se deslizaron por el suelo acercándose a él.

— Ya no hay tiempo para más juegos, hermano — Dijo ella con suavidad.

En ese momento, Shouto sintió, como su tobillo se humedecía, tenía el brazo izquierdo cubierto por agua y ahora el pie derecho también.

— ¿Quién dijo que estaba jugando? — Respondió con altanería.
— Usa tu don hermano, sabes que esto acabará pronto si no lo haces. — Sugirió la pelirroja.
— ¡Nunca usaré esa maldición! — Rugió enojado.

Shouto congeló el suelo e hizo que el hielo trepara sobre Lázuli, cubriéndola hasta las caderas.

— Fuérzalo a usar mi don, Lázuli — Ordenó Endeavor con un tono de voz irritado.

Ella miró a su padre y luego a Shouto, con un nudo en la garganta comenzó a cerrar su puño, ocasionando que la presión del agua aumentase, empezando así a aplastar el brazo y pie de Shouto.

— Vamos Shouto... — Fue casi una súplica.
— ¡No! — Se mantuvo orgulloso aunque su rostro reflejaba dolor, causado por la presión en sus extremidades.
— ¡Hazlo! — Grito ella apretando más fuerte.

La chica obtuvo un quejido ahogado como respuesta, Lázuli no pudo evitar acongojarse al notar el dolor de su hermano. Con suavidad retiró la presión que ejercía sobre las extremidades de su hermano y con su otra mano se libró del hielo que la mantenía estática, cambiando su estado a líquido, lo direccionó hacia Shouto y lo extendió por su cuerpo hasta formar una esfera perfecta, teniéndolo prisionero desde los pies hasta el mentón, dejando libre su cabeza para que respirara.