Incompetente (phan)

Capítulo 02 - h

Phil PDV

Llegué al enorme edificio de cristal exactamente a las 10:34 de la mañana.

El sol se reflejaba en las ventanas haciéndolas parecer un espejo gigante, en lo alto se encontraban letras brillantes que deletreaban 'Howell y Edwards'.
Había personas de traje sosteniendo portafolios corriendo a toda prisa dentro y fuera del edificio, viéndose como si sus vidas dependieran en llegar a su próximo destino.

Caminé hacia la negra y dorada puerta de entrada tratando de no mostrar mi nerviosismo.
Enfocándome en poner un pie delante del otro para no tropezar, hice mi camino hacia adentro.

Se veía más moderno y costoso que afuera, como si eso fuera posible. El edificio debió haber costado millones si no es que billones.

La recepcionista me recibió con una sonrisa, probablemente porque está en la descripción de su trabajo. "Hola, ¿puedo ayudarle?"

"Uh, si. Necesito hablar con los Howell." Dije cambiando mi peso de un pie a otro.

"¿Tiene una cita agendada?"

"Um, no. Pero es para el Daily Mail, es realmente importante," dije rápidamente. "Sólo me tomará unos minutos, lo juro." Quería esta entrevista. Entre más lo pensaba más me daba cuenta de lo bueno que sería para obtener un aumento, para superar mi torpeza social por hacer esto solo, esto ayudaría con un montón de cosas.

Ella me regaló una sonrisa triste en lugar de la sonrisa feliz que estaba en su rostro hace un momento. "Lo siento, señor. No puedo dejarlo pasar si no tiene una cita. ¿Le gustaría agendar una?"

Sabiendo que no estaban disponibles para una entrevista en los próximos años, sacudí mi cabeza en respuesta. "No, gracias. Sólo me iré."

"Siento no poder ayudarlo. Tenga un buen día."

"Usted también," dije alejándome lentamente del escritorio. Usando los espejos alrededor de mí, la observé, esperando hasta que se volteara para escabullirme de su escritorio a los elevadores junto al área de recepción.

Rápidamente entré y cerré las puertas antes de pinchar el botón número 79 con la descripción 'Oficina D Howell'.

Era el último piso, lo que me asustó un poco.

No podía recordar quien de los Howell era 'D' pero estaba cruzando mis dedos para que fuera el menor, porque él se veía más amable en la entrevista que pude encontrar en internet.

Cuando salí del elevador, me encontré en un gran cuarto blanco, con una pequeña sala de espera y pinturas que se veían costosas colgadas en cada pared.

A la izquierda del cuarto habían dos puertas doradas y justo al lado de ellas un escritorio enorme con una bonita chica sentada detrás de el.

Me miró sorprendida. "No estaba al tanto de que alguien venía."

"Um, necesito ver a los Howell." Mi voz temblaba ligeramente.

Ella frunció el ceño. "¿Tiene una cita?"

Maldita sea. "Si, la tengo." La mentira salió más fácil de lo que esperaba.

Ella oprimió un par de botones en su computadora antes de voltear a verme con una ceja levantada. "Nop, no hay citas agendadas para las 10:40."

"No puede ser, he tenido esta cita agendada por años. Quizá haya algún error." Mentir no es exactamente mi fuerte, pero a tiempos desesperados, creo que sí.

"Llamaré al Señor Howell. ¿Quién debo decir que pregunta?"

"Phil Lester."

"Muy bien, puede tomar asiento."  Me señaló la pequeña sala de espera. Asentí en respuesta y fuí a sentarme, el asiento era más cómodo que cualquier mueble que yo tuviera. Había una variedad de chocolates que se veían costosos puestos en una mesita de café. Tomé uno de chocolate blanco.