¡Bienvenidos Al Circo!

prólogo

Park Seong Hwa, un joven muy dedicado a lo que hace, muy buen visual, talentoso y heredero del circo de su padre. Cumplió sus 21 años el 3 de abril del 2019, el circo ya estaba autorizadamente en sus manos, quiera o no ya que era una tradición desde su tatara tatara abuelo, pero él no se quejaba, el amaba el circo.
El arte de las acrobacias, la ciencia de los trucos visuales, las hipnotizantes risas del público.

Simplemente siempre le llamo la atención.

Desde joven veía videos de circos profesionales, de contorsionistas, distintos tipos de acrobacias, tela, aros, malabares y la cuerda floja.

Práctico para eso eh inclusive su padre lo llamó para participar de sus girar varias veces.

Solo había un problemita...muy grande. Casi todos los integrantes del circo habían renunciado al enterarse que un niño empezaría a mandarlos, un niño al cual veían inexperto. El señor Park ya no podría encargarse de eso por un buen tiempo, pues su pierna estaba muy dañada luego de caer desde unas escaleras y tenía una fractura sería. Era dudable si volvería.

Claro que eso no fue un problema, seong wha no se rindió nunca, hizo una mini campaña de inscripciones abiertas, ya tenía a bastante gente inscripta, mañana tendrían las primeras pruebas de el talento que se traían.