Desplegando las alas

IX

Los días y las noches pasan como siempre. Todo es tan monótono: de día vienen Sae y su nieta, por la tarde me quedo sola hasta que me acuesto a dormir del aburrimiento. Peeta no ha vuelto ni me ha llamado ni una vez y ya ha pasado una semana desde la última vez que hablamos por lo de los dulces que nos trajo. Por la tarde voy a casa de Haymitch porque me aburro demasiado. No me molesto en llamar ya que sé que la puerta está abierta. Me quedo en el hall antes de llegar al salón ya que oigo su voz... Me pego a la pared y escucho.

-La verdad es que tienes bastante lio muchacho... -oigo a Haymitch.

-Lo sé Haymitch pero es que me da miedo hacerle daño -oigo la voz preocupada de Peeta.

- Katniss podrá superarlo Peeta, estoy seguro -dice y creo que noto un punto triste.

Oigo los pasos de Peeta acercarse al hall para irse. ¿Qué hago? Me va a ver. Entonces entro al salón como si hubiera acabado de llegar.

-Hola Haymitch, Peeta -saludo con la mano- ¿Qué hay?

Peeta se queda mirándome y mueve la cabeza negando para sí.

-Yo me voy yendo ya.. -le hace un saludo a Haymitch con la mano- Adiós Katniss...

Y se dirige a la puerta pasándo por mi lado. Lo miro con tristeza mientras se aleja y finalmente abre la puerta, sale y la cierra a sus espaldas desapareciendo él de mi vista.

-¿Qué preciosa? ¿Has disfrutado de él estos días? -pregunta Haymitch moviendo el brazo en el que tiene la botella de líquido transparente que le gusta.

Le bufo y me siento a su lado.

-Odio que evite hablar conmigo. La semana pasada me trajo dulces para Sae, su nieta y yo pero... ya no lo he vuelto a ver ni me ha vuelto a hablar. ¿No lo ves? Me evita. -digo y me hundo más en el mullido sofá.

-Katniss... pensaba que lo tenías más o menos superado y que tenías al amigo ese tuyo.. ¿cómo se llamaba? -bebe.

Gale. No. No sé nada de Gale desde que hablé con él en el Capitolio cuando descubrimos que fueron sus bombas las que mataron a mi hermana. Mi hermana. Muerta.

-Katniss,  no me has respondido -me dice Haymitch. Pasa su mano por delante de mis ojos para que le conteste. Lo miro. Está preocupado.

-Lo siento Haymitch... ehm si, Gale. Pero ya no somos amigos. -digo seca.

Oigo a Haymitch suspirar.

-Pues la he liado pero bien..

-¿Por?

-Pues porque.. -parece pensarselo- Peeta no se acerca a ti porque le da miedo que salga el muto y por eso -traga hondo- por eso se va a ir del distrito.

Siento como si me hubiera caído un vaso de agua fría en la cabeza.

-No... no puede irse. Yo lo necesito -reconozco.

-¡Katniss, si lo hubiera sabido no le habría dicho que se fuera!- dice él.

-¿QUÉ? ¿Tú se lo dijiste? -me levanto enfadada.

-Pensé que le vendría bien -dice intentando calmarse- pensaba que tu estabas con el minero y no quería que el chico lo pasara mal. Encima que no quiere acercarse a ti para no dañarte yo creo que le haría bastante daño verte de la mano de ese amigo tuyo.

Asiento, tiene razón.

-¿Cuándo va a marcharse? -le pregunto a Haymitch.

-Mañana por la mañana.