Estoy confundida.
Mi corazón grita que te ama, pero mi encéfalo entró en un dilema.
Tus ojos destellan bondad, solo eso y nada más.
Mi corazón sigue ilusionándose cada vez que me sonríes.
Mis neuronas explotan y lo único que queda de mí son los latidos que tu produces sin siquiera insistir.
No puedo culparte, pero lo hago.
Me dijeron que tuviera cuidado, porque lo peor que podemos hacer es mendigar amor enamorados.
Quiero dejar de buscar tu mirada.
Dejar de escribir cuentos de hada.
Cuentos de hada que tú y yo protagonizamos.
No tienes idea...
Ni la más mínima.
Mi cabeza está llena de gritos y llantos, diciéndo "Te amo", a la espera de una respuesta que jamás llegará.
Jamás llegará, por mi falta de valentía y seguridad.
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Escritos Sempiternos
De TodoSimples escritos... Escritos sempiternos de una persona peculiar.
