Un Beso Con Sabor a Alcohol.

Abuelo salido.

*Este capítulo contiene escenas eróticas, si eres sensible no lo leas por favor o sino sigue leyendo y te gustará, gracias.*

Sara salió de la habitación enfadada en pelotas, llegó al salón, cogió unos zapatos, salió al patio y cogió ropa de Manu que se había caído allí. Justo el vecino de Sara estaba en su patio que estaba al lado de la casa, el vecino estaba echandole de comer al perro y al levantarse miro para el lado y vio a Sara y Sara lo miro.

Sara: Ey tío, ¿que haces?

Vecino: Em... Nada, echandole de comer al perro. *Dijo mirándole las tetas*

Sara: *Se se levantó, se puso una camiseta rápido y se acercó al hombre* Tío, me cago en ti, ¿por qué me miras las tetas? *Le escupió en la cara*

Vecino: Joder Sarita, es que te me presenta aquí con todo al aire y... *Dijo mientras se le levantaba su miembro*

Sara: ¡Puto abuelo salido! *Dijo gritándole e iendose del patio*

Al entrar a la casa Manu estaba andando por el pasillo porque iba a ir porque Sara estaba gritando.

Manu: ¡Sara! ¿Qué te pasa?

Sara: Manu tío, nada.

,Manu: Si, a ti te pasa algo no mientas que te e oido gritar.

Sara: Bueno, pues que el vecino de al lado me a mirado todo ¡y encima se a empalmado! ¡Básicamente!

Manu: ¿¡Que qué!? ¿El tío ese? Pero si parece mi abuelo, me voy a cagar en el mierdoso ese...

Sara: Pero tú no me la líes, no le digas na'.

Manu: Que no dices...

Sara: ¡Que no Manu! *Dijo poniendose delante de él*

Manu: El tío ese se va a enterar... *Dijo enfadado mientras se ponía unos pantalones e iba hacia la puerta*

Sara: Bueno, yo paso, me voy a bañar. *Al llegar al pasiilo* Manu, no le hagas nada por favor.

Manu: No te prometo nada. *Cerró la puerta*

Sara: Pff, tu verás...

Sara se fue al baño. A los 15 min. terminó de ducharse, salió al salón y se extrañó porque Manu todavía no había llegado a casa. Ella salió al patio, se asomó, miro a la casa del abuelo salido y vió que estaba el canal de fútbol y no había nada de enfados.

Sara fué a su habitación, cogió una camiseta, unos pantalones y las zapatillas de casa, salió de su casa y tocó en la puerta del vecino. A los tres segundos abrieron la puerta y era Manu con la camiseta quitada, un porro en la boca y en proceso de emborracharse.