Las diosas del olimpo (MOONSUN)(Red Moon)

Capítulo 7

POV Wheein

Al regresar al olimpo desaparecí de la vista de Byul como si mi vida dependiera de ello. Había aprendido muchas cosas en el mundo humano y tenía que ponerlas en práctica en este mismo instante. Camine como normalmente lo hacía por el olimpo en dirección al templo de Hwasa, al estar cerca me teletransporte a su habitación.

- Hwasa estas aquí - empecé a susurrar por si acaso.

Caminé por la habitación buscando algún rastro de la diosa con la mirada, hasta que vi un bulto en su cama. Me acerqué lentamente con una sonrisa y empecé a moverla.

- ¡Ahí estas! - me lancé a la cama y aplasté el cuerpo de Hwasa.

- Estaba durmiendo Wheein, tuve una sensación muy rara, sentí que te ibas ¿Dónde estabas? - Hwasa se levantó.

- Por ahí, pero no podía regresar sin traer algo, tengo nuevos juguetes ¿quieres probarlos? - le dije con una sonrisa pícara.

Hwasa no me entendió, pero empujé su cuerpo sobre la cama y me puse encima de ella. Acaricié su bello rostro y deje un caso beso en sus labios, materialice unas esposas que llevaba guardadas desde mi viaje con los mortales.

- ¿Qué es eso? - Hwasa sonrió.

- Te lo dije, es un juguete - lleve sus manos detrás de su espalda y la espose, de mi rostro no se borraba la sonrisa que tenía desde que ingrese a su habitación.

Es aquí donde se viene lo chido, ya sabemos que fue a investigar la Wheein, pero en este perfil nos reservamos esta parte a la imaginación 😂

POV Normal

La diosa Artemisa estaba recostada en su cómoda e inmensa cama siendo atendida por sus doncellas, en estos casos pensaba que ser una diosa no esta tan mal después de todo. Todo se encontraba en paz y armonía hasta que escucho un pequeño sonido.

- ¿Quién está haciendo tanta bulla? - Moonbyul abrió los ojos.

- Creo que es usted mi señora - una de las doncellas señalo una parte del cuerpo de Byul que brillaba.

- ¿Ah? ... retírense - dijo Moonbyul.

- Claro, llámenos si necesita algo mi señora - las doncellas se inclinaron y se retiraron de la habitación.

Moonbyul tomo el celular en sus manos y en la pantalla tenía un mensaje de Solar. Casi había olvidado por completo que tenía un celular, el mensaje decía «Podemos vernos, me gustaría hablar contigo». La diosa sonrió y decidió que era el momento idóneo para regresar al mundo humano. Cuando cayó la noche en el olimpo Moonbyul salió de su templo y camino hasta el pozo, retrocedió unos pasos y saltó.

Moonbyul volvía a caer en la misma bodega, vestía pantalones negros ceñidos a su cuerpo, una camisa blanca sin ninguna arruga, una chaqueta de cuero junto a sus zapatillas negras. Salió del lugar con el celular en las manos y llamó a Yongsun.

- Hola - dijo Moonbyul.

- ¿Eres tu Moonbyul? - Yongsun tenía la voz algo ronca.

- ¿Te he despertado? Lo siento mucho - Moonbyul se sintió algo mal.

- Oh no, estoy de turno en el hospital, te parece vernos después de que termine de trabajar.

- No te preocupes, si quieres podemos vernos otro día.

- Estoy bien, hablar contigo me dará fuerzas Byul.

- Okey, paso a recogerte cuando termines.

- Salgo a las 10 am, que te parece, te mandaré la dirección por un mensaje.