Por favor, si apenas estas leyendo estas palabras TE ADVIERTO que lo pienses muy bien, ya que afortunadamente aún tienes oportunidad de dejar de leer esta historia y continuar con tu vida.
Pero si sigues leyendo, bueno entonces eres un verdadero fan...
No recuerdo como sucedió exactamente pues en ese entonces yo tenia unos 13 años de edad. Pero lo que si puedo decir es que el miedo que sentí en ese momento aun sigue fresco en mi memoria.
Bueno comenzare a contarles:
Por alguna razón (que aun no logro descifrar) me había despertado aquella madrugada a las cuatro A.m.
Sin quererlo fui perdiendo el sueño poco a poco, y la verdad en serio detestaba que eso me pasara (y tanto me cuesta tanto volver a conciliar las ganas de dormir). Pero bueno, que mas podía hacer.
Decidí entonces tomar mi teléfono y revisar mi Facebook para ver si encontraba algo interesante. Luego de unos minutos en los que estuve viendo varias fotos, memes y demás, termine por aburrirme.
Observe la hora: eran las 4:41 Am. No lo soporte mas así que opte por levantarme para ir por un vaso de agua.
Abrí la puerta de mi cuarto y mire hacia los lados observando el largo y oscuro pasillo, y como lo supuse: No había nadie mas en el, aunque bueno creo que eso es obvio ¿no?, eran las cuatro de la madrugada y yo era el único tonto con insomnio que deambulaba por la casa, todos los demás aun debían estar durmiendo.
Pero en fin... me dirigí a la cocina teniendo como objetivo el refrigerador. Al llegar simplemente lo abrí y tome una garrafa con agua y un vaso.
Me dispuse a servirme cuando en un instante sentí que por detrás de mi se oyeron varios pasos.
Me quede helado, voltee rápidamente sin encontrarme a nadie. Eso si que fue extraño, estaba seguro de que oí algunos pasos, como si alguien hubiera corrido rápido por detrás de mi. Pero no vi a ninguna persona.
Tome con prisa mi vaso de agua, esto que acababa de suceder me había puestos los bellos de punta, así que decidí regresare lo antes posible a mi cuarto.
Al llegar cerré la puerta y prácticamente me tire a la cama cubriéndome con las sabanas.
Sin que yo me diera cuenta mi respiración se había puesto un poco acelerada. No entendía porque me estaba poniendo de esa manera. Así que decidí calmarme un poco por que la verdad si: Estaba exagerando un poco.
Me repetía a mi mismo que era una tontería asustarse tanto por algo tan simple. Y sí era cierto: Solo fue un pequeño susto, ademas seguramente me lo había imaginado por la falta de sueño. Si eso debía ser.
A partir de allí me comencé a sentir mas tranquilo, mi respiración fue volviéndose cada ves mas lenta y luego de eso deje de sentir miedo.
Con tranquilidad retire la sabana de mi cabeza, ahora si que comenzaba a sentir las ganas de dormir otra vez, lentamente fui cerrando mis ojos dejándome llevar por los brazos de Morfeo hasta que me percate de algo, por un momento no me había dado cuenta pues la adrenalina que sentía no me permitió concentrarme.
Pero ahora que mis latidos comenzaron a disminuir su ritmo, y mis sentidos volvían a normalizarse por decirlo así.
Justo en ese momento sentía que algo estaba allí junto a mi, no esta totalmente seguro pero creía que podía sentir su respiración, podía sentir su mirada.
¡PERO... PORQUE!
No me atreví a girar mi cabeza, no quería observar lo que estaba aquí en mi cama, pero fue imposible, lentamente gire mi rostro y allí pude ver a esto...
— SHHH... no digas nada— me susurro colocando su sucio dedo encima de mi boca— también sentí miedo asi que decidí quedarme aquí contigo— me mostró su desgarrada y enferma sonrisa— nos cuidaremos el uno al otro ¿ESTAS DE ACUERDO?...
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¡No, No, No¡... Esto no puede ser real. ¿Que es esto?
— ¡¡¡MAMAAAA!!!— grite con todas mis fuerzas.
Esa simplemente se seguía riendo, era un ser horrible, ¿que clase de cosa era?.
Mi madre llego varios segundos después, abrió la puerta de un solo golpe y encendió la luz, pero lamentablemente esa cosa ya se había ido.
Le explique a mi mama lo que había pasado, pero por alguna extraña razón ella penso que lo que sucedió solo había sido una pesadilla.
Yo insistía en que aquello si era real pero ella ya no quiso seguir con el tema. Y así se quedo ese asunto.
Lo único que puedo decir es que esa noche fue cuando viví mi primera experiencia fuera de lo normal.
Fue cuando por primera vez en mi vida sentí el verdadero terror.
