Secreto descubierto

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La Mansión estaba tranquila, Shindou después de haber hablado con su novia, bajó, pero el sonido de unas teclas de piano llamó su atención, la música de aquel instrumento le traía un inmenso dolor.

Hiroshi tomó sus cosas de la clase para irse mientras Akane estaba practicando una canción, el niño al salir de la habitación ve a su padre y se sorprende. Este intenta hablarle a su hijo, pero este lo evade- Yo no sé nada. - dijo para luego salir corriendo.

Akane acomoda las partituras y comienza a tocar improvisadamente para dar paso a la melodía que iba a tocar mientras cantaba.

_ Fue hace un tiempo que yo te amaba

y ahora todo un recuerdo será

Romance o melodrama fue nuestra historia

Con un final que no estuvo mal.

unidos por el love scenario

las luces del lugar ya se han ido

veo el telón que ha descendido

con un suspiro largo nos fuimos. _

Shindou abrió más la puerta y entró viendo lo concentrada que estaba mientras cantaba, se acercó más haciendo evidente su presencia, ella solo volteó y paró de tocar, se levantó del asiento pues no le había pedido permiso en todo ese tiempo para usar la sala- Discúlpeme, no quería incomodarlo usando el lugar, si no está de acuerdo no la volveremos a utilizar. Discúlpeme fui imprudente. - hizo una reverencia a modo de disculpa.

- Debió pedir permiso, pero es que supongo que antes no se lo hubiera dado, pueden seguir dando clases no me molesta, le quiero pedir que me enseñe lo que estaba tocando, me ha parecido algo interesante.

Akane muy feliz le enseñó las partituras y la letra de lo que cantaba. Ella se sentó y le hizo espacio para que tomara asiento y comenzara a tocar.

Pasaron un rato practicando la melodía y la canción juntos ya que él se la quería aprender, la letra le gustaba.

_ A veces vuelvo a sentir en mi mariposas

tu mirada me hizo entender que la vida es preciosa

de ti yo aprendí mucho más, tu eres mi mitad

eres alguien muy especial para olvidarte así y nada más. _

Shindou enfatizó más en esa parte, ella lo miró un momento con algo de extrañeza por su comportamiento hacia ella mientras seguían en la tonada, él de igual forma le dedicó una mirada, pero en la de él había ternura.

Ella paró y aclaró su garganta- Bueno, creo que estoy demorando mucho con las clases de Hiroshi-sama. – Se levantó y ordenó algunas cosas para seguir. – Si lo desea le dejo las partituras por si quiere seguir ensayando.

- Si, claro... me encantó mucho, entonces pude retirase.

- Con permiso. – Akane siguió su camino hasta la habitación, una vez ahí el niño le brinca.

- ¡¿Le hizo algo?!

- ¿Por qué tendría que hacerme algo? Tu padre no dijo nada.

- Pues si no le dijo nada sobre usar el salón de piano pues podríamos intentar... bueno lo he estado pensando, que le pidamos entre los dos que nos deje ir al parque a jugar los sábados y eso. Por favor, no me gusta mentir y me gusta jugar mucho con los niños del parque.

La InstitutrizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora