Para ti: Sin Nombre

CAPÍTULO 31 CONSTANTES Y VARIABLES

Me encontraba en la habitación del hospital, no entendía lo que estaba sucediendo, veía a Héctor y a Lucía llorar por verme, apenas he estado durante unas pocas horas, pero esta vez me he llevado el mayor susto de mi vida, ha sido la sensación más bizarra de toda mi vida, pero al mismo tiempo ha sido un momento muy hermoso, lástima que no fue algo real.

- Stefan... – es lo primero en decir Lucía antes de lanzarse sobre mí.

Es curioso, pero he estado escuchando algunas cosas que pasaron a mi alrededor, a pesar de haberles gritado, nunca pudieron escucharme, es como si en cierto modo hubiese estado muerto, sin tener voz ni voto sobre la situación, estando allí presente pero sin ni siquiera ser considerado ¿realmente puedo considerar que he estado vivo durante este breve tiempo?

Inmediatamente tras confesarle mis sentimientos a Lucía y tras saludar a Héctor, intento ponerme en pie, pero mis piernas no responden, están más delgadas de lo que pensé, me siento débil y muy adolorido, es en ese entonces donde me tambaleo, incluso llegando casi a caer, si no fuera por la rápida respuesta de Lucía así hubiese sido. Lucía me ayuda a caminar hacia la ventana, quería ver la mañana desde la ventana, la vista es hermosa, ver como la ciudad se ilumina con un nuevo día es maravilloso.

- ¿Qué ha pasado? – pregunto a Lucía.

- ¿No recuerdas nada de lo que ha sucedido?

- No, solo recuerdo que ayer estaba en la universidad con Natalia y después nada más.

- ¿Ayer?

- Si, ayer fue cuando me desmayé – respondí mirándola a los ojos.

- Stefan... eso no fue ayer – responde ella mirando al piso.

En ese momento un doctor entra a la habitación, me aconseja que me siente en la cama, y razón tenía en ello. Me comenta todo lo que ha sucedido, no he estado un día inconsciente, han sido 21 días en los que he estado en coma, un coma provocado por la anestesia, resulta que mi cuerpo no la tolera de la manera adecuada y eso provocó el coma, la verdad es que no entiendo muy bien esa parte, pero si entiendo la parte del tumor, incluso me quitan el vendaje de mi cabeza y veo la cicatriz que se puede apreciar ya que incluso no tengo cabello, mi cabeza ha sido afeitada, parezco un judío al cual le hicieron experimentos los nazis en la segunda guerra mundial.

Mi tumor ha estado creciendo con el paso del tiempo, posiblemente se originara desde el accidente, pero no es del todo seguro, lo que sí es seguro es que mi salud estaba mal, debido a los excesos que he tenido con el tiempo y la muy mala alimentación que he tenido, pero eso no explica por qué veía a Lauren, eso no logro entenderlo aún, pero recordando con lo que ella me dijo en mi sueño, fue una advertencia.

Tras explicarme toda la situación, Charlotte, Natalia, Nikole y Andrea pasan para verme y allí es donde veo los cambios que han tenido todas y cada una de ellas. Charlotte está muy delgada, han sido unos días muy angustiantes para ella, pero se la ve muy alegre por ver que estoy recuperándome.

Natalia se ve muy hermosa, su embarazo se nota bastante y realmente me muero de ganas por saber si será un niño o una niña, la verdad es que cada día que pasa me entusiasma más saberlo. El mayor cambio que puedo apreciar en Nikole es que ha ganado algo de peso, luce igual al momento en el que nos conocimos, a diferencia de que se ha cortado el cabello, luce bastante bien la verdad. Y por último, Andrea, ella está completamente feliz de verme despierto y es de las pocas veces que la he visto llorar, ella siempre ha sido una chica dura y algo insensible en algunos momentos, pero a pesar de ello es una gran amiga que me alegra de que esté junto a nosotros en este momento.