|Epilogue|

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Las puertas se abren dejando ver a una hermosa chica con una cabellera de incontrolables rulos rojos, se quita unas gafas de sol debido a los fuertes rayos de sol que había ese día, deja ver unos preciosos ojos azul celeste y largas pestañas negras.

Se dirige con una sonrisa a la caja al ver a un chico de espalda idéntico al chico de sus sueños, este se da media vuelta y la chica solo lo mira con un poco de decepción, el chico era igual al otro... Solo que sus ojos eran color miel y portaba una notable barba.

–Disculpa, ¿cuándo llegará Hiccup?

–Lo siento, el ya no trabaja aquí.

Sus ojos se cristalizaron, ¿cómo que ya no trabajaba aquí? ¿Lo despidieron? ¿Tuvo problemas? Un montón de preguntas pasaron por su mente, solo pudo pronunciar un "gracias" y emprendió paso a la salida.

–Tu eres Merida, ¿verdad?

La recién nombrada paró en seco giro su cabeza hacia el lado de la voz, era la señora que hace un tiempo la había regañado por tener unos hermanos tan revoltosos, ella asintió y una sonrisa con un poco de tristeza se dibujó en su rostro, le hizo una seña para que se quedara en su lugar y la esperara un momento, la chica algo confundida obedeció a la señora y esperó.

–Esto es para ti, lo dejó Hiccup antes de irse.

Merida tomo la libreta con sus delicadas manos y sus ojos volvieron a cristalizarse, observó el obsequio con tristeza y una sonrisa apareció en su rostro.

–También me pidió que te diera estas gomitas, tranquila, las acabo de sacar.

Ambas sonrieron y Merida solo dio las gracias para retirarse del lugar.

Una, dos, tres... Incontables lágrimas empezaron a salir de sus hermosos ojos provocando que no pudiera ver bien las calles, personas o autos. Tomó su celular y marcó a su mejor amiga para que la fuera a buscar.
























El llanto no cesaba, con cada palabra que estaba escrita en las cartas su corazón se rompía más y más, si tan solo no le hubiera dado gripe ella hubiese seguido yendo al MiniMarket para poder ver esos penetrantes ojos verdes, veía los dibujos de ella y otros de dragones, paisajes, animales, etc.

Tomó su celular y buscó entre sus contactos el número del chico que había robado su corazón desde el primer día, ese día que fue con sus hermanos a comprar algo solo porque tenían hambre después de clases, luego al verlo todos los días el cariño empezó a crecer, hasta el dia en el que le regaló ese paquete de gomitas, su corazón se derritió, nadie había hecho algo así por ella, solo su mejor amiga, pero nunca un chico.

Apretó el contacto para realizar la llamada, una, dos, tres..

–¿Aló?































Tadaaa, el fin de esta pequeña novela, solo espero que les haya gustado... Ojooo, este no es el final, es solo el comienzo.🌻

¦✦GUMMIES✦¦ MERICCUPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora