Héroe

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Mientras iba por la calle, pasando frente a los locales, divisó un rostro conocido, sin poder recordar quien era para así mirar más de cerca a esa persona que se le hacía tan familiar. Entró y se sentó en un lugar apartado del resto para no llamar mucho la atención, veía a la chica delgada, de pelo castaño sirviendo a las mesas los pedidos solicitados, siendo cordial y coqueta con los clientes. Cuando esta hizo un guiño recordó a quien pertenecía esa cara. Era de Susan, nunca pensó que la encontraría en lugar así. Otra mesera se acercó al lugar donde este estaba.

- Buenas, ¿Va a pedir algo? -Preguntó la mesera algo aburrida-

- Eh... si, una cerveza está bien. -Dijo tratando de no perder de vista a Susan-

- ¿Algo más? ¿Algo para comer?

- No, gracias.

- Enseguida se lo traigo. -Dijo la mesera y fue por lo pedido-

Susan iba con otro pedido en las manos en dirección a la mesa correspondiente, cuando de repente se tropieza por culpa de un hombre llamado Jack, de unos 44 años que le había puesto el pie, a causa de esto, se le cayó todo haciendo que todos se volteen a ver la escena. Tom al ver lo sucedido no duda en ir a encarar a ese hombre que se reía a carcajadas, haciéndole malos comentarios a la chica.

- ¡Eh! ¡Que te pasa! -Grito Tom, pasando frente de Susan-

Susan lo reconoció de inmediato, era el chico del perro de aquella vez, de inmediato esta lo alcanzo por el brazo.

- ¿Qué haces aquí? -Preguntó Susan sorprendida-

- Los mismo me pregunto, este no es sitio como personas como tu chiquillo. -Dijo Jack con risa burlona-

- Sera mejor que te vayas, yo solucionare este lio. -Dijo Susan, mientras le daba tirones para que este se fuera-

- No dejare que personas como este tipo se metan contigo. -Dijo Tom todo héroe-

- No te hagas el héroe ahora, solo vete y hablaremos después. -Dijo Susan algo molesta-

- Sera mejor que le hagas caso a esta "señorita", así te vas vivo. -Grito Jack y todos rieron-

Claramente las cosas no estaban a favor de Tom, vio a su alrededor, pero cuando sus ojos vieron a los de Susan, trato de calmarse.

- Lo haré por ti. -Miró a Susan-

- Contigo me las veré después. -Amenazó a Jack y este se puso a reír-

Tom salió del local, aun molesto por la acontecido, no podía aceptar el hecho de que trataran en menos a las personas. ¿Qué hará Susan?, se preguntó así mismo. Sin más que hacer caminó a su casa, ya era de madrugada y mañana tenía clases. Lo único a su favor que no debía presentar el trabajo, así que se fue a dormir directamente a la cama, sin antes poner la bendita alarma que todo el mundo odia.

No es lo que creesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora