Notas: Feliz cumpleaños a mi amado Jiang Cheng :) 💜💜💜
OS sin editar ni revisar, ya después lo edito. Pretendo que este escrito forme parte de un fic 100% postcanon que tengo en mente para más adelante. Espero que escuchen la canción que me recordó mucho a mi bebé Cheng Cheng.
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¿Qué he hecho con mi vida hasta ahora?
Cultivarme...
Reconstruir mi secta y liderarla...
Cuidar de Jin Ling...
Esperar por ese idiota de Wei Wuxian...
Y...
Jiang Cheng giró hacia su lado izquierdo en aquella tibia cama. Había luna llena y la luz que se colaba por la ventana era intensa para permitirle mirar alrededor de su habitación. La persona a su lado dormía plácidamente con el largo cabello negro extendido en las sábanas y sus respiraciones profundas y acompasadas, era el ejemplo perfecto de lo que significaba estar en paz y armonía.
¿Cómo llegamos aquí?
¿Cómo pude llegar aquí?
Se preguntó a sí mismo suspirando y se dio cuenta de que en aquellas noches de su vida, precisamente una noche antes de su cumpleaños, siempre le daba por repasar lo acontecido en su camino. Pero el hecho era que en esta ocasión las cosas habían cambiado. Podía sentirlo en el ambiente, aquella sensación de extraño bienestar, esa cálida opresión en su pecho. De pronto tuvo la imperiosa necesidad de mirar hacia su lado derecho.
Ahí estaba él. Lan Huan. Aquella persona que era tan ajena a él y ahora se había convertido en parte de su todo. ¿Cómo podía ser eso posible? Jiang Cheng suspiró y con su mano derecha tomó un mechón del largo cabello de su pareja, lo acercó a su nariz y aspiró profundamente. Ese aroma... gencianas y extrañamente mezclado con lluvia, le traía una rara sensación que hacía muchísimo tiempo no sentía. En realidad, se empezaba a preguntar si alguna vez antes de él la había sentido.
Ese aroma le llenaba de quietud. La sensación le invadía todo su cuerpo, podía inhalar profundamente y exhalar con descanso sin sentir pesadez en sus hombros. Aquella pesadez que sentía desde la muerte de sus padres, la destrucción de su secta, las muertes de sus hermanos y la vuelta a la vida de uno de ellos. Aquella quietud era paz, la cual era muy ajena a su ser y que ahora sentía consigo mismo... después de tanto.
Aquella paz que no lograba recordar desde cuándo no sentía o si un día la sintió. Era parecida a cuando era joven, cuando su familia estaba con él, cuando sus hermanos eran sus cómplices y lo ayudaban a sobrellevar las presiones que sus padres le mandaban directa o indirectamente. Pero sus hermanos también se fueron y se llevaron su paz con ellos. Aun así, de alguna forma siempre estuvo a la espera de que Wei Ying regresara y cuanto más pasaba el tiempo su llamado odio aumentaba. Aun con los sentimientos de amor mal encaminados en odio guardaba sus esperanzas de volver a encontrar paz.
Pero cuando más la necesitó y la buscó nunca llegó a él. Cuando era joven siempre quiso ser enteramente feliz pues tenía a su familia, pero aun así nunca se sintió suficiente para sus padres y de nuevo se preguntó a sí mismo si en realidad alguna vez había sentido aquella tranquilidad, si alguna vez había sido suya. Jiang Cheng tuvo que madurar a muy temprana edad y podía darse cuenta de eso a través de su sobrino. Mientras Jin Ling necesitaba de él constantemente a sus ya casi dieciocho años, él ya había cobrado muchas vidas en sus manos, ya estaba por su cuenta a cargo de su secta y debía encargarse de sus hermanos, siendo el menor actuaba como el mayor.
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Antología MDZS y The Untamed
FanfictionTodas las historias en éste libro son One Shots (historias solo con un capítulo). Ideas locas y cortas que vienen inspiradas de la novela con la que sigo obsesionada, también con los actores del live action porque me gusta el KuanCheng. Aquí habrá X...