Chalastor: Una relación planeada

Sólo necesitas amor

- Bah, él no sabe nada.. Es sólo cosa de hablar con Vaggie y ¡Boom! caso cerrado. - Decía Charlie para si misma mientras caminaba en circulos frente a la puerta principal del Hotel.

Un estúpido y sensual Angel Dust la observaba desde uno de los sofás del loby, mientras disfrutaba de una pequeña paleta rosa.

- Eh, ¿Puedo preguntar qué es lo que estás haciendo? -
Dijo el albino, levantando una ceja mientras balanceaba sus piernas sobre el sofá.

-Espero a Vaggie.. - Respondió la chica

- Qué interesante.. - Concluyó Angel, mientras daba un suspiro.
Éste se levantó del sofá y mientras se acercaba a Charlie comenzó a susurrar:

- Niña tontita...-

- ¿A-ah? - Dijo la rubia, mientras se giraba hacia él.

- ¡Oh!.. Nada, nada.. Es sólo que, bueno, tal vez deberías dejarla sola. Está algo molesta. Ya sabes, él tipo rojo de la radio y sus amiguitos.. - Comenzó a sonreír mientras le ponía la mano en el hombro a la chica.

- Angel, ella es mí novia. Entiendo que esté molesta, sólo necesitamos hablar un poco. - Comentó, mientras miraba al chico intentando sonreír.

- Es lo que las parejas hacen.. - Concluyó la rubia.

- Claro, es lo que hacen si tú novia no es una amargada zor..-
Angel Dust, a punto de decir algo completamente desubicado (como siempre), vio la cara de su amiga, la cual estaba notablemente preocupada. Éste suspiró y le dio un pequeño abrazo para después despeinarla.

- Digo heh.. Sí, eso es lo que se hace.
Además ¡Ustedes dos hacen un muy buen dúo! - Sonrío Dust.

El triste rostro de Charlie se había transformado en una bella cara esperanzada, lo que provocó que abrazara a su amigo.
- Muchas gracias..-

Angel sonrío, pero inmediatamente se despegó de la rubia.

- Sí, no le digas a nadie que te he abrazado -
Comentó, mientras le guiñó el ojo.
- Alguno de mis amantes se pondrá celoso -

Charlie comenzó a reír, pero después de esto, cada uno siguió con lo suyo. La chica se sentó en uno de los sofás mientras observaba hacia la puerta, cuando de pronto vio como la manilla se movía, y la gran puerta comenzaba a abrir.
Era su amada Vaggie, la cual tenía un rostro sereno, completamente distinto a cuando Alastor llegó.

- ¡VAGGIE! - Gritó Charlie completamente emocionada, mientras se abalanzaba sobre esta.

- ¡Ch-Charlie! - La chica gris se ruborizó mientras correspondía el abrazo.

- ¿DÓNDE ESTABAS? ¡POR BELZEBÚ, ME ASUSTÉ MUCHÍSIMO! - Gritó exageradamente la chica mientras no soltaba a su novia.

Los exagerados berrinches de Charlie llegaron a oídos de Alastor. El cuál intrigado, con una gran sonrisa se acerco al lugar sin ser visto. Oyendo desde el pasillo, completamente inmóvil.

- Y-Yo.. ¡Discúlpame por favor!
Charlie, no debí haberme ido así, lo siento. Estaba molesta, pero.. -

Charlie (Al igual que Alastor) se quedaron atentos a las palabras de la chica gris. Pero la rubia, a diferencia del demonio de la radio, estaba completamente nerviosa.

- Ah.. Tienes razón, debo apoyarte en esto. Quizás, Alastor no es tan malo.. - Comentó Vaggie, mientras se picaba el rostro.

- ¿¡HABLAS EN SERIO?! - Dijo la rubia, agitando a Vaggie completamente sorprendida.

- ¡Claro que hablo en serio!.. Yo, te amo. - Al terminar estas palabras, la chica gris besó levemente a Charlie.

Ésta, emocionada de la cabeza hasta los pies, le devuelve muchos besos, mientras ambas ríen.

Alastor, que ya había oído suficiente, simplemente se fue por el pasillo bastante sonriente, pero esta vez de una manera macabra.

- Ríe mientras puedas. - Comentó para sí, mientras comenzaba a reír levemente.

¿Se traería algo entre manos?