Testosterona 3ra temporada (Aristemo)

10-Festejemos con un rico postre

Aristóteles salió de ese gran edificio feliz por haber conocido a Felipe y darle una gran oportunidad de demostrar su talento, saco su teléfono para contarle lo sucedido a Temo, sin embargo el menor por estar tan ocupado con Mateo no respondió a la llamada, así que el rizado decido llamar a otra de las personas más importante en su vida: Polita.

-Ma- menciono Ari en el momento en que su madre respondió

-Aris- dijo feliz- hace mucho tiempo que no te comunicabas conmigo, como les va a ti y a Temo? Han comido bien?- Ari rio- ahorita acabo de salir de casa de tu tía Blanca, tuve que llevarme los toppers, ya sabes, para que coma Arqui...-

-Si claro- rio nuevamente mientras caminaba por las calles de la ciudad-

-Niños!- se escuchó Polita gritar- no jueguen así en las escaleras, se van a caer!- suspiro- Yolo a ver si los cuidas-

-Yo no los voy a cuidar- se escuchó a lo lejos la adolescente, Ari suspiro nostálgico, deseaba poder estar allá

-Lo siento mi Aris- se escuchó como se adentraba al departamento y cerraba la puerta detrás de ella- para que me hablabas-

-Ya conseguí quien produzca mi música- dijo con una gran sonrisa

-¿Qué?- grito un poco- ¿es enserio?

-Si ma- al escuchar la afirmación de su hijo, comenzó a brincar de la emoción

-Me da mucho gusto, que estés creciendo y cumpliendo tus sueños- se sentó en una de las sillas de la mesa- ¿qué te dijo Temo? ¿Cómo está el? - Ari al escuchar aquello su sonrisa seso, Temo no había respondido a sus llamadas, temía que ahora que estaban cumpliendo sus sueños el tiempo ya no fuera suficiente.

Ari abrió la puerta del departamento, y como lo esperaba, el departamento estaba vacío, decidió sorprender a Temo, con una rica comida al momento de llegar, comenzó a preparar viendo los videos de su Tia Blanca en su canal de Youtube, luego hizo un en vivo con sus fans, para no sentirse solo y compartir lo que estaba haciendo para su amado, muchos fans adoraban la pareja. Al termino del live se sentó en una de las sillas observando con orgullo lo que había preparado, pasaron los minutos, no había ninguna señal de Temo, ni en el teléfono y tampoco entraba al departamento, Ari movía la comida con un tenedor, tenía mucha hambre, pero quería esperar a su prometido para comer juntos, se llegó la noche y el rizado ya estaba dormido.

Temo abrió lentamente la puerta, el departamento estaba oscuro, suponía que el rizado dormía, camino hacia la habitación, pero no lo vio ahí, camino hacia la otra habitación y tampoco se encontraba, "no ha llegado" pensaba, camino directamente hacia la cocina para beber un poco de agua, tenía un dolor de cabeza por el estrés, y no del trabajo, si no de estar soportando a Mateo, prendió el foco de la cocina y se encontró con una escena demasiado tierna, Ari durmiendo con comida en la mesa.

-Ari- susurro temo al acercarse a él mientras movía lentamente su cuerpo

-¿Mmh?- logro decir el mayor mientras abría sus ojos-hola..- levanto su cabeza mientras estiraba sus brazos

- ¿Que es todo esto? - Temo señalo la mesa

-Quería sorprenderte- se encogió de hombros para después bostezar.

-Lo siento mucho Ari- el rizado negó con la cabeza haciéndole ver que no importaba- vamos a calentarlo, no perderé la oportunidad de comer con este chico apuesto- se colocó atrás del mayor, pasando sus manos sobre su pecho para luego besar su mejilla.

-Tengo muchas cosas que contarte- Temo se separó tomando los platos de la mesa para llevarlos al microondas.

-Yo igual-