Capítulo 2

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El esqueleto de apariencia tétrica se sorprendió ante su nuevo descubrimiento, desde que conoció a Geno sabía que ese esqueleto de bufanda color sangre tenía un alma bondadosa pero no sé imaginaba que llegara a tales extremos para ayudar a los demás sin duda alguna ese maestro se estaba ganando cada vez más el alma de Reaper, pero el no sabía el porque de llevar alimento a los huérfanos según tenía entendido que el trato monetario que se le estaba implementando por parte de la familia real era bastante bueno... Pero al parecer estaba equivocado.

—Sin duda tendré que modificar un poco las cosas del reinado de mi padre—Susurro para si mismo ya que si le hacía frente a Geno en ese momento tan solo se ganaría su repudió y eso es lo menos que desearía en ese instante ya que a decir verdad él ya sabía que había caído a los pies de el maestro, solo faltaba que el otro aceptará su cercanía, pero se estaba olvidando de un detalle muy importante, ya que al ser un príncipe tenía que casarse con otro y lastimosamente Geno era un plebeyo... el plebeyo más hermoso en su punto de vista

Sin decir o vigilar a Geno desde la oscuridad, se puso en camino para volver al castillo y revisar los libros de contabilidad de cuánto dinero se le estaba proporcionando a las cosas significativas de su querido pueblo, al llegar al mismo se aventuró a la biblioteca rápidamente pues tenía que saber cuál era el transfordo de la situación económica verdadera, después de un tiempo se dió cuenta que el dinero que se le proporcionaba al pueblo no era ni un cuarto de lo que su padre se gastaba en artículos ostentosos, desgraciadamente en ese momento Reaper se quitó la venda de sus cuencas dándose cuenta de que su padre imponía impuestos solo para satisfacer sus mundanos deseos.

—Ese maldito saco de huesos— Gruño apretando sus puños mientras cerraba aquel libro para después guardarlo en el lugar que correspondía— Si me quejo de esto con mi padre me podría acusar de rebelión y encerrarme en un calabozos... Pero si no digo nada el pueblo pasará penumbras y dificultades— Frente a ese predicamento simplemente suspiro recargandose en el respaldo de la silla en la que se encontraba sentado, mientras se hundía cada vez más en sus pensamientos ni escucho al guardia que estaba frente a él

—Mi señor, mi señor— Habló sin recibir respuesta pues su príncipe estaba ido—¡Mi señor!— Se atrevió a gritar con miedo ya que no le hacía caso

—¿Mm? ¿Qué sucede?— Pregunto pasando las manos por su rostro

—Él rey solicita su presencia— Dijo fuerte y claro como cualquier otro guardia hablaría

—De acuerdo muchas gracias— Terminó esa simple conversación levantándose y saliendo de la biblioteca dirigiéndose directamente a dónde estaba su padre, su progenitor comúnmente se encontraba siempre en la sala de reuniones ya que él tenía una tendencia por tener alianzas con otros reinos a pesar de lo lejos que se encontraban. Era algo para sentirse seguro con respecto a su reino.

—Aquí estoy padre, ¿Para que me necesitabas?— Le preguntó Reaper a esté con expresión neutral

—Bueno hijo... Al parecer Dream será el próximo rey ya que aún no encuentran el paradero de Nightmare, por lo cual él rey de Dreamtale y yo hemos decidido que el compromiso quedará anulado— Avisó su padre causando una gran sorpresa por parte del príncipe

—¿Hablas enserio padre?— Cuestionó aún con sorpresa sin creerse las palabras de su padre

—Claro que hablo enserio— Decía mientras levantaba un papel— Él había venido antes y firmamos este acuerdo donde queda estipulado que nuestra relación tan solo será una alianza de reinos, aunque esa idea tampoco me desagrada— Sonrió victorioso aquel rey

—Entonces padre, ¿puedo contraer nupcias con quién yo decida?— Preguntó dudoso ante la respuesta que le podría dar su mayor

—Claro hijo puedes casarte con quien quieras... con tal que sea de la nobleza estará bien— Comento sonriendo pues aquel adulto pensaba que su hijo se había enamorado de algún príncipe o princesa, pero no sabe lo equivocado de estaba

—Oh... Sobre eso— Iba a comentar sobre Geno pero al recordar lo discriminativo que era su padre sobre las clases sociales se quedó callado

—¿Que ibas a decir hijo?— Preguntó el rey al notar la expresión de su hijo

—Nada padre, entonces me retiro— Comentó haciendo una ligera reverencia para luego salir de aquel gran salón

Ahora aquel príncipe se encontraba caminando por los alrededores de ese castillo, se preguntaba que era lo que podía hacer ahora, su compromiso estaba anulado eso le hacía muy feliz pero algo que le inquietaba demasiado es que si le dice a su padre que tiene sentimientos amorosos por un simple campesino, esté se enojaría demasiado y mandaría matar a ese pobre maestro... Ahora simplemente no sabía que hacer estaba perdido entre sus pensamientos.

Hasta aquí el capítulo de esta vez, espero que les haya gustado hasta la próxima jeje.

The art of teaching love [afterdeath]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora