Único Capítulo - El Embrujo OS

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Las cosas en el mundo mágico habían cambiado muchísimo, eran 7 años desde la caída de Voldemort y todo estaba tomando su curso nuevamente, claro, aún quedaban cicatrices, hay heridas que no son fáciles de curar, pero todo iba tomando su lugar poco a poco y la paz que se respiraba, era algo que toda la comunidad no podía quitar.

No se podía negar que fueron difíciles los primeros años, perdida de personas, miedos, dudas, perjuicios, acusaciones y sobre todo injusticias y hablando de esto último, Severus Snape, era uno de los afectados de todas esto negativo, aun se preguntaba, ¿por qué seguía vivo?, para él, era la mayor injusticia de esta guerra, había cometidos muchos errores, hizo mucho daño, muchas personas muriendo por su culpa, simplemente el no merecía seguir viviendo. Luego de sobrevivir a la mordedura de Nagini, Merlín sabe cómo lo hizo, imaginó que pasaría el resto de su vida, pudriéndose en Azkaban como el mortifago que fue; durante el juicio se decía mentalmente que ese era el motivo porque había sobrevivido, para pagar cada una de sus acciones, encerrado, se lo tenía merecido, pero ocurrió otra injusticia, para su parecer, Potter lo defendió a filo y espada logrando que quedara libre.

Él sabía que lo siguiente no iba a ser sencillo, las personas no creían en el, muchos lo tildaban de traidor, cosa que a Severus no le importaba, pero se sentía perdido. ¿Ahora qué haría? Ya no debía cuidar de nadie, ya no era el títere de sus amos y su vida ya no corría peligro constantemente, por primera vez en años, era libre y no sabía qué hacer con esa libertad. El primer año, volvió como profesor, claro, era a lo que estaba acostumbrado, estar rodeado de niños sin una neurona en la cabeza que se dedicaban a explotar calderos como meta personal, pero luego de meditarlo mucho, decidió dejar la docencia, si la vida le estaba dando una nueva oportunidad no la iba a gastar encerrado en el castillo, debía hacer cosas nuevas, pero surge una nueva incógnita, ¿Quién le daría trabajo a un ex mortifago, a la mano derecha del señor tenebroso durante muchos años? La respuesta es sencilla, nadie.

Pero, él era Severus Snape, el mejor pocionista de Gran Bretaña, podían tener perjuicios hacia él, pero nadie podía negar el talento y los conocimientos que tenía cuando se trata de pociones, así que ¿Por qué no abrir una botica?, no tendría jefe, ni mocosos molestándolos, solo sería el y la soledad haciendo lo que tanto amaba. Así fue como Severus abrió su botica en el Callejón Diagon, las ventas aumentaron en una velocidad impresionantes, las mejoras de Severus nadie podía conseguirlas en ningún lado, tenía tantos encargos que se vio en la necesidad de contratar empleados, que debieron pasar una larga y extensa prueba para poder trabajar y fue así como también pudo abrir otra botica en Hogsmade.

Por otro lado, estaba Hermione Granger, la bruja más inteligente de su generación, la guerra se había llevado a sus padres, que por más que los protegió, un mes luego de la caída de Voldemort, mortifagos que no habían sido capturado aun, los atacaron mientras tenían una cena familiar, no fue sencillo, pero era una mujer fuerte que podría salir adelante. A diferencia de su mejor amigo y su novio, ella regreso a Hogwarts a terminar sus estudios, no iba a permitir aprovecharse de un título de "héroe de guerra" para no culminar sus estudios, ella siempre quiso ganarse las cosas por esfuerzo propio, no por ventajas.

Ese año le sirvió para sanar todas las heridas que la guerra le había dejado, para convertirse en la mujer que deseaba. Todos le decían y esperaban verla en el ministerio para que a los años se convirtiera en Ministra de Magia, pero eso no estaba en sus planes, no podía negar que el prestigio le llamaba, pero ella siempre fue alguien servicial que ayudaba a quien lo necesitaba, por lo mismo consideró dedicarse a la medimagia, pero no lograba estar segura, hasta que finalmente decidió dedicarse y especializarse en la creación de pociones curativas, para sanar y aumentar la velocidad de recuperación de los heridos.

Los primeros años en la universidad fueron todo un reto, llena de experiencias nuevas, experimentos, era otro nivel. Aun así, como siempre destacó en cada una de sus materias y actividades, creando maravillosas pociones y mejorando otras, logrando que su nombre fuera reconocido no solo por ser miembro del Trio Dorado, si no por sus creaciones. Su último año de carrera era completamente práctico y desde que comenzó su carrera, sabia con quien quería hacer sus prácticas, aunque muy posiblemente, esa persona no quisiera lo mismo, si su ex profesor dejó la docencia, jamás iba a querer asesorar a la insufrible sabelotodo del trio dorado.

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