Odiame...Si puedes [AioriaxShura]

Capítulo 9

Shura se sentía nervioso era sábado por la mañana había pasado tres días desde la batalla de Aioria. Él jamás se había sentido él chico más atractivo; ni el más carismático mucho menos verse en plan de una relación, ese sábado se despertó cinco de la mañana fue al pueblo, vio el primer puesto de flores que recién se habría, compró un ramo de orquídeas amarillas. Una parte de el se sentía como un tonto -Ah que chico le gustaría que le regalen orquídeas y que sea otro chico quien se las de - pero ahí estaba parado a fuera del templo con su gran ramo -Ya estas aquí, ahora entra.

Shura se sentía nervioso, sentía que era peor que cuando adquirió su armadura, una gran parte de él no quería que este Aioria. Ni bien lo pensó lo vio, sentado en la grada, se acomodaba las vendas de su brazo, eran nuevas pero se teñian con un poco de sangre. -Él aún no me vio, puedo escapar.

-Hola...shura - sintió deseos de decirle "mi amor", pero sentía mucha vergüenza. Shura tenía el ramo de rosas en su espalda, estaba nervioso.

- Hola... - se sentía tantos nervios.

-¿Qué tienes en tu espalda?.

-Niño curioso - Aioria lo miraba entretenido.

- Te compré algo.

Los ojos del gato brillaban, como cuando de niño su hermano le traía regalos se veía tan adorable -¿Qué, que es?.

-Bueno... no se si te gustara - le mostro el ramo de rosas, Aioria se sorprendió -Ahora que lo pienso es bastante absurdo que te de un ramo de rosas, ya sabes tu eres un chico...

Lo abrazo por el cuello -¡Gracias! Lo ame- al separarse tomo su rano de orquídeas amarillas - Las pondré en agua - fue hacia la cocina; cuando Shura entró no podía negar que si se estaba enamorando cada vez más del santo de Leo al verlo tan feliz con un simple ramo, estaba oliendo las rosas que ya estaban puesta en un pequeño jarrón, se notaba el cariño que le tenía el tocar los pétalos con tanta delicadeza, era una imagen tan difícil de olvidar -Me gusta verte así de contento.

Aioria dejo el jarrón en la ventana -Lo siento me perdí en mi mundo.

Para Capricornio era fácil ponerlo nervioso a su novio -¿Así piensas salir? - Aioria estaba con un corto de color blanco con flores; una solera ancha y sandalias -Si, ¿por qué no? ¿Iremos al pueblo, no?.

-En realidad quiero que vayamos a la ciudad -Si bien Aioria había nacido en Grecia, él no conocía casi nada de su ciudad, desde que tenía uso de razón él había crecido y vivido en el santuario y lo máximo que había llegado a conocer es el pequeño pueblo.

Aioria se vistió lo mejor posible, intento peinar sus rebeldes mechones; tardó casi media hora en la cual Shura lo esperaba en la cocina. Apareció su pequeño un tanto desganado pues entre la batalla de su cabello y él, había triunfado su cabello -Es lo mejor que pude hacer- se sentía molesto consigo mismo.

-Te vez muy lindo - se levanto de su silla acomodó un par de mechones -Me encantas -beso su frente.

-Vamos, tenemos un largo recorrido que hacer

-De eso no te preocupes, iremos en mi moto.

-¿Moto? - se aparto -¿Tienes una moto?.

-Si, pero no la usó mucho que se diga.

Su moto era una Cafe Racer Style Scramble, totalmente negra, Aioria alucino viendo la moto y más cuando estaba encima de ella, llegaron a la ciudad mientras recorrían las calles en la moto Shura le hablo -Primero debemos comer - llegaron al mercado central de Atenas; parqueo su moto, Aioria parecía como un turista - Se que debería llevarte a un buen restaurante almorzar, pero quiero que tengamos todo un día de turismo.