10-Convergencia paralela.

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Todo iba bien, platicas normales y nada fuera de lo común.
Al parecer le había gustado el collar que le obsequie, que por cierto no fue nada fácil de conseguir y en el trayecto salí lastimado al realizar la caja donde irían.
Nos dirigimos a comer algo normal en una salida de amigos, cada quien pidió su platillo favorito.
Fue en ese preciso momento donde todo el universo a mi alrededor se retorció de una manera que no pude haber previsto.
Comenzamos a platicar sobre nuestro pasado, todo lo que nos había dañado y el como es que podíamos seguir adelante simplemente con sonreír frente a la sociedad, sin que ellos supieran que por dentro estábamos cada día mas muertos o agonizantes.
Fue la primer chica en conocerme realmente sin mascaras, sin miedos, sin restricciones que dificultaran su libre navegación en mi vida.
Ella fue un poco mas cerrada en ese sentido no averigüe mucho acerca de ella. Todo siguió de una manera agradable hasta que pasábamos a retirarnos, por alguna razón comencé a sentir nauseas incontrolables, lo asocie con mis nervios ante el momento, pero enseguida lo descarte ya que en todo el día había estado bastante bien.
Llegamos al lugar donde ella partiría de regreso a su hogar, pero antes de que eso pasara decidí proseguir con mi plan:
-Oye- le dije con bastante seguridad en mis palabras
-Dime- contesto un poco desconcertada ya que creía que ya no tenia nada que decirle.
-Hay algo que llevo mucho tiempo dándole vueltas en mi cabeza- proseguí mientras sentía como el estomago se me revolvía nuevamente y comenzaba a sentirme ridículo y observado.
-¿Que cosa?- Contesto con natural curiosidad ante mis palabras.
-N..no se como decirlo o explicarlo- comenzaba a tartamudear y a sentirme nervioso.
-¿Tan malo es?- me dijo al percatarse de que me comenzaba a poner nervioso al estar con ella.
Juntando todo el valor que podía en ese momento decidí decirle lo que sentía sin mas rodeos, ni metáforas que no entendería.
-Sabes desde que te vi te me hiciste una persona bastante interesante, decidí conocerte y hacer una amistad contigo, pero el destino cambió los planes para mi y mis emociones...
Ella solamente me miraba fijamente mientras yo hablaba, cosa que incremento mi nerviosismo
-A final de cuentas me terminaste gustando, no se que me paso o que sucedió, pero esto que siento no lo he podido evitar.
Un incomodo silencio llenó el ambiente, en mi cabeza giraban infinitas posibilidades y respuestas.
Solo estaba parado esperando una gratificante respuesta o un fulminante final.
Una palabra que podía cambiar y cambió todo en mi vida.

Relato de un corazón silenciado [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora