Kunoichis En La Guerra

Capítulo 01

-o-

Normativa

-o-

El salón se silenció cuando la Hokage hizo su ingreso, con el rostro serio se posiciono frente al gran grupo de kunoichis que la esperaban, a su lado su asistente Shizune se posiciono con una gran caja en las manos.

-Escuchen todas- llamo con tono severo- Las he convocado aquí para hacer pública una nueva normativa que quedara en vigencia desde este momento, pero antes de revelar su contenido tengo algo que decirles-

La rubia mujer suspiro por lo bajo y estudio a las jóvenes frente a ella, la mayoría con miradas de curiosidad.

-Todas nosotras sabemos que una nueva guerra se ha declarado y que la batalla es inminente. Pero para la mayoría que no ha vivido una guerra anterior le es difícil visualizar la realidad que esto implica.-

Su mirada azulada paseo por los rostros jóvenes de las kunoichis a su cargo, se fijo la meta de recordarlas a todas, ya que seguramente poco menos de la mitad sobrevivirían.

-En esta guerra se perderán muchas cosas, varios de sus amigos y familiares morirán, sus hogares serán destruidos y más de uno sufrirá de tortura a manos del enemigo. Pero para una kunoichi las cosas pueden ser diferentes, ya que más que todo, más que cualquier tipo de entrenamiento y habilidad que posean, son mujeres, mujeres jóvenes. Por esa razón caer en manos del enemigo cambia de significado.-

Las kunoichis mayores miraron con recelo la escena armando en su mente el significado de las palabras.

-Muchas de ustedes aún tienen intacta su virginidad y es su derecho decidir a quién y cuándo entregársela. Pero en tiempos de guerra eso no se decide, porque pueden arrebatárselas a la fuerza, con violencia o con métodos mucho menos piadosos-

El salón entero emitió un suspiro

-Por esa razón y para proteger ese derecho, hare vigente desde este momento una antigua normativa dirigida solamente a las kunoichis de la aldea de la hoja y las que tengan un nivel de chunnin o superior o a las que piensen ingresar en batalla de forma activa-

Tras una seña Shizune empezó a repartir con ayuda de dos asistentes más, blancos pañuelos a todas las presentes, la mayoría los estudiaba sin entender, otras que entendían o habían tenido educación en ello se cubrieron el rostro con angustia, entre ellas las hijas de clanes importantes de la aldea.

Al ver las reacciones la Hokage quiso apurar sus pasos, luego de esa reunión tenían muchas otras.

-Lo que tienen en frente no son pañuelos normales, están impregnados con una fragancia especial, además de una sustancia que evita que se ensucie con fluidos ajenos a la sangre. Su objetivo en estos dos días es escoger a un hombre de la aldea según sean sus gustos y entregarle su virginidad, como prueba de que cumplieron deben manchar el pañuelo con su primera sangre cuando consumen el acto.-

Murmullos llenaron la sala, la Hokage las dejo debatir entre ellas por un momento, pero luego su firme llamada las silencio.

-Les parece injusto y cruel, lo sé, pero esta normativa fue hecha para evitar la deshonra de las kunoichis de la aldea y evitar también que la mente de las afectadas se pierda. Ustedes no lo saben y piensan que no les puede pasar y tal vez es asi, pero les pasara a muchas, por esa razón deben cumplir, por una orden directa de la líder de esta aldea y por ser un medio en las que se protegerán.-

La Hokage se cruzo de brazos firme en su resolución, lo hacia por ellas. Muchas empezaron a sollozar.

-Silencio, aun no termino de hablar. Esta norma se pone como prioridad sobre cualquier regla o ley que tenga sus clanes o grupos, no pueden alegar eso, además hay una segunda parte en esta normativa. A fin de mejorar su cumplimiento y garantizarlo, se ha establecido que se le hara comunicado a los ninjas varones de la aldea, la normativa como a ustedes los obliga a aceptar cualquier proposición con ese objetivo que se le haga, durante estos dos días, nadie podrá negarse-

Una joven ninja se puso de pie.

-Hokage-sama, no pensara que simplemente hagamos "eso" muchas estamos comprometidas y tal deshonor...-

-¡No has escuchado lo que dije!- la Hokage golpeo una mesa cercana- ¡Esta normativa lo sobrepasa todo!-

-Pero si...¿si quedamos embarazadas?- pregunto otra tímida voz

-Shizune- la Hokage mando y una nueva ronda se distribuyó.- Las hierbas que contienen esas bolsas evitaran un embarazo, deben tomarlas al menos una hora antes de consumar-

Hubieron nuevos murmullos.

-Si por algún motivo no pudiesen beberlas y quedaran en estado, es decisión suya mantener el embarazo o terminarlo cuando quieran, todo esto se hara en absoluta reserva.-

Golpearon a la puerta y un ninja apareció susurro una par de palabras al oído de Shizune que rápidamente las transmitió a la superior, esta arrugo el rostro.

-Para la mañana del tercer dia deberán entregar sus pañuelos con la marca de su sangre a su superior inmediata que lo hará llegar a mí. Pero antes de nada se lo duro que puede ser para ustedes, la mayoría aun es joven, pero esa es la vida de una kunoichi. Y aunque la normativa incluye a cualquier hombre, les pido que no elijan a hombres casados o alguno que sepan esta comprometido por intereses egoístas. Pueden irse.-

Nadie se movió, algo frustrada fue la Hokage la que abandono la habitación. Grupos se formaron tratando de entender las palabras y otras se fueron para entender el asunto en soledad.

Una copia de la normativa estaba pegada en una pared cercana donde se arremolinaban viarias de las más jóvenes.

Todo por una guerra que vendría.