Ladrón de Fantasías

480 44 1
                                    

Hinata oculto su rostro lloroso en su almohada, luego de la reunión de esa mañana había empezado a llover y con ella su corazón, se veía forzada a entregar aquello que había estado guardando para entregarlo al amor de su vida, a su único amor.

Pero eso era ahora un olvido, apretó el blanco pañuelo entre sus manos, su suave olor era relajante, pero solo lo consideraba una mascarada para su cruel propósito.

Tocaron a su puerta y Hinata salto en su sitio.

-Hinata-sama ¿se encuentra bien?-

Hinata gimió de angustia.

-S-si-

Paso un momento de silencio

-Si quiere hablar sobre la normativa...-

Hinata se sonrojo

-No. No Neji-nissan estoy bien s-sin problema-

-De acuerdo la dejo descansar-

Escucho los pasos alejarse y se hundió aún más en su almohada, su primo sabia, sabia lo de la normativa. Era tan vergonzoso.

Pero había una pequeña voz en su mente que decía que no todo era malo, que quizá esa seria la oportunidad de por fin confesarse a su primer dulce amor, estaba segura que con la normativa no podría decirle que no. Eso le daba mas seguridad.

De esa forma podría entregarse a Naruto-kun. Podría robarle al tiempo un momento real de pasión.

Real.

La idea la agitaba por completo y clamaba por ser estudiada a fondo, pero aun era de día y tenía cosas que hacer, fue a la casa de su maestra donde fue recibida con sabios consejos y del cual tuvo que huir cuando la conversación se giró en formas de evitar que su primera vez no doliera.

Por suerte tenia que encontrarse con Tenten, una buena amiga que compartía su misma preocupación, hablaron e intercambiaron diferentes puntos de vista, pero ninguna sabia como evitarlo, además de estar conscientes de que las palabras de la Hokage eran ciertas.

Vieron un barullo frente a la tienda de lencería, al parecer un grupo de mujeres se congregaba en ella para comprar la ropa más adecuada para su gran día, escucharon parlotear con fingido desinterés a varias de ellas y hondar en su importancia para dar una buena impresión al chico elegido.

A ninguna de ellas parecía interesarle, caminaron varios pasos antes de que Hinata suspirara y se unieran a la reyerta, Tenten la siguió a penas. Por suerte la demanda iba en ascenso en ropa íntima atrevida y de colores pasionales.

Lo cual no era el estilo de ninguna de ellas.

-Mira este Hinata-

Tenten levanto un pequeño perchero, mostrando lencería blanca de encaje que hacia juego con un par pequeño de alas de ángel.

-Este te quedaría bien-

Hinata se sonrojo, mas por lo que su mente forjo de la nada.

-N-no es lo mio-

Hinata escapo a otro pasillo, viendo los modelos sencillos. Encontró un conjunto elegante más que llamativo pero conservador al mismo tiempo que le gusto bastante, de color azul oscuro en el centro e intermedios en las orillas.

Se lo mostro a Tenten que tenía ya el suyo elegido de color negro y sobrio.

-Podre usar este más veces- le explico simplemente

Salieron de la tienda luego de hacer fila media hora

-o- -o- -o-

Hinata se hundió entre sus suaves sabanas en cuanto llego, estaba cansada mentalmente imaginando y pensando en los preparativos para esa fecha en especial, no quería que fuera extremo, pero si quería que fuese perfecto.

Kunoichis En La GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora