Un mundo maravilloso

Capítulo 5: El reto

la escuela femenina hadas de las flores, es un lugar donde las niñas de entre seis a doce años aprenden los conocimientos básicos como lo son las matemáticas, historia, literatura, arte, etc, antes todas las niñas tenían el derecho a una educación gratuita y de calidad, pero ahora ese derecho se convirtió en privilegio que pocas podían tener

aún estudiando ahí solo pocas alumnas han podido graduarse y recibir una educación superior y la razón de aquello era que a todas las estudiantes durante todo su tiempo en aquella escuela, se las pone a prueba secretamente para sacar a flote a las mejores de las mejores

básicamente sino eres especial en algo, no eres nada y si no eres nada no mereces nada

esta era una norma que con desagrado había aprobado la reina, luego de la gran tragedia

en aquella gran escuela, Lily se encontraba sentada en medio de un pequeño campo de flores, escribía algo en su cuaderno y al terminar arrancó la hoja la dobló por la mitad y la puso en un sobre rosa, escribió "a Lana" y la lanzó hacia el cielo y esta se alejó volando

sigues enviándole cartas a tú hermana, ¿verdad? - se oyó decir una voz femenina, y Lily al oírla se había volteado, viendo a la persona que menos soportaba en esa escuela y a su grupo de seguidoras

Lily: Jane, ¿que es lo quieres?

una chica de cabello rojo y ondulado, ojos azules y de la misma altura de Lily, vestía de una falda azul, zapatos negros, medias grises que le llegan hasta las rodillas, una blusa blanca, sus pechos eran un poco más grandes de los de Lily, pero su principal característica era que su frente era más amplia de lo normal

Jane: oh nada importante, solo quería hacerte acuerdo del día de mañana, porque... sabes que día es ¿cierto?

Lily tenía un gran problema, ya que ella a diferencia de ella, no tenía un talento registrado y esa era una forma de quedarse en esa escuela, la otra era pagando una elevada cantidad de dinero y en esos momentos ella no contaba con ninguna, y el día de mañana era su fecha límite

Jane: oh lo siento Lily, no quería hacerte acordar de lo inútil y pobre que eres, que lástima, creo que mañana será el último día que te veremos

Lily se había molestado por lo que dijo, pero ella se tranquilizó y en respuesta sólo dio una sonrisa

Lily: lo siento Jane, pero estaré aquí hasta el último día, te guste o no

Jane: ha ha, esa es una buena broma, después de todo eres la hermana de una payasa

Lily: no es una broma, y también soy la hermana de una domadora de bestias, lo que seré en el futuro ya que también tengo una y es mejor que la tuya

la chica pelirroja guardó silencio por unos instantes

Jane: eres una mentirosa

Lily: no es mentira

Jane: está bien, si así lo quieres entonces te reto a un duelo, mañana veremos quien es la mejor

Lily: acepto

tras aquello, había sonado la campana que indicaba el regreso a los salones de clases, y desde ese momento hasta la hora de salida se extendió el rumor sobre aquel enfrentamiento

mientras tanto muy lejos de ahí Lincoln se encontraba recostado en medio el campo, y la razón de aquello era que desde que había salido el sol comenzó a hacer todo tipo de ejercicios, como lo eran correr, saltar la cuerda, unas sentadillas, unos abdominales y finalmente unas lagartijas, hacia todo eso una y otra vez

faltaban seis días para el torneo y su cuerpo no estaba en buenas condiciones y era por eso que debía hacerse lo más fuerte que podía, todo para enorgullecer a Lily

al pensar en Lily se percató por la posición del sol que ya eran cerca de 14:30 pm, lo que significaba que Lily estaba por llegar de la escuela

Lincoln: (gimiendo) debo... continuar

el albino dio media vuelta, al tener su cara contra el pasto con sus manos a un lado de sus hombros con la fuerza que aún le sobraba, levantó la parte superior de su cuerpo sólo para volver a bajarla

Lincoln: 1, 2, 3, 4...

después de unos minutos ya estaba llegando a su límite

Lincoln: 57... 58... 59...

solo le faltaba una más para llegar a los sesenta, sus brazos temblorosos ya lo habían elevado, solo necesitaba descender con cuidado, y entonces fue impactado en su espalda por algo sumamente suave

Lincoln al estrellarse contra el suelo no se podía mover, algo lo aplastaba y ya no tenía la fuerza para moverse, pero no era molesto ya que en su espalda podía sentir como algo caliente, blando y sobre todo enorme

Lincoln: Lily... ¿podrías moverte?

Lily: ji ji, te he visto hacer ejercicio desde hace un rato, te esfuerzas mucho por mí ¿verdad?

Lincoln: quizás

Lily se bajó de la espalda de Lincoln y le extendió su mano para ayudarle a levantarse

Lily: no te esfuerces mucho, vale

Lincoln: de acuerdo - el albino la miró por un segundo y había notado que no era igual a la otra Lily, antes de lo arruinara todo

el gruñido de su estómago había acabado con el momento, y mientras Lincoln se tocaba el estómago con avergonzado, a Lily se le ocurrió algo perfecto para la ocasión

Lily: ven acompañame - la pequeña Loud tomó la mano de Lincoln y se lo llevó a uno de sus lugares favoritos

al cabo de unos diez minutos llegaron a un río, el agua era muy clara y se podía ver a unos cuantos peces nadando

Lily: este es mi segundo lugar favorito, es muy genial verdad

Lincoln: si que lo es

Lily: mientras pesco y cocino nuestra comida, tú ve a asearte

Lincoln obedeció a Lily, y después de unos minutos volvió completamente limpio, mientras Lily había hecho una fogata con unos peces asandose encima

Lily: justo a tiempo, ven toma uno

Lincoln se sentó a un lado suyo y tomó uno, lo olió por un segundo

Lincoln: huele bien

le dio la mordida y le sabía realmente bien

Lily: ¿te gusta?

Lincoln: si, es delicioso

tras haber comido Lincoln se recostó el suelo, el sol estaba por  ocultarse

Lily: ¿te gustaría un masaje en los hombros?

Lincoln: no, gracias, así estoy bien

Lily había sido muy amable con él, de hecho era demasiado amable

Lincoln: oh oh - Lincoln miró a Lily y ella sonreía mientras juntaba ambas manos a la altura de su pecho

Lily: sabes, hay algo que quería pedirte

Lincoln: (suspiro) esta bien, ¿que es lo quieres?

Lily: sabes, hoy en la escuela...