Breaking Rules (Harry Styles & Tú) [PAUSADA]

Capítulo 1

*______'S POV*

Tras una larga e interminable hora de camino, por fin llegamos a Demont. Bajé del coche asustada, no quería quedarme, no quería separarme de mis padres, no quería abandonar a mis amigos, a mi perro Taz, quien aún era un pequeño cachorro de 5 meses, ni mi casa. Quería volver a Oxford con ellos. No podían ser capaces de dejarme aquí y marcharse. Aquí no tenía a nadie.

—Venga cariño, entremos, ya verás que acabarás siendo tan feliz aquí que luego no querrás volver a casa.—Me había dicho mi madre.

—Sí, además no tienes de que preocuparte, vendremos a por ti todos los fines de semana.—Dijo mi padre.

—Sí, y en fiestas, y en navidad y cuando termines en verano y nos iremos todos juntos de vacaciones, tú escogerás el lugar.—Añadió mi madre emocionada.—Oh, una cosa más. Ten.—Mi madre me tendió pequeña caja con un lazo.—Es un Iphone de esos que usas tú, ya sé que tienes uno, pero en este centro está prohibido el uso de los dispositivos móviles y te harán entregar el tuyo. Al tener este podrás comunicarte con el exterior de todas formas. No me sentía bien dejandote aquí tan aislada.—Explicó mi madre mientras sacaba el teléfono de su caja.

—Pues entonces no me dejes.—Supliqué por última vez.

—Sabes que tenemos que hacerlo cariño, es por tu bien.—Dijo mi padre.

—Está listo para usar, solo tienes que encenderlo.—Trató de cambiar mi madre de tema.

—Está bien, intentaré sobrevivir.

Un hombre nos hizo pasar a dirección, dónde una mujer llamada Claire Walter, quién pude adivinar era la directora, nos explico las normas básicas del funcionamiento del centro y tomo mis datos rellenándo lo que parecía ser una matricula.

—Bien, ya está todo listo señorita Rose. Su habitación será la 319 y se alojará allí junto a tres chicas más. Por favor entrégueme su teléfono y podrá irse.

—Aquí tiene.—Dije apagándolo y dándole el antigo Iphone, quedándome solo con el nuevo.

—Muy bien. Stacy, nuestra secretaria se encargará de guiarla hasta su habitación correspondiente. Gracias por elegir Demont, espero que disfrute de su estancia aquí los próximos años y logre su objetivo como estudiante.—Dijo la mujer esbozando una sonrisa que no me pudo parecer más falsa. << ¿Años? ¡Iba a morirme ahí dentro!>>.

—Bueno cariño, nosotros ya nos vamos, te vendremos a buscar en una semana.—Dijo mi padre al ver a la secretaría que me llevaría hasta mi nueva habitación, y una lágrima comenzó a deslizar por mi mejilla.

—Oh, no cariño no llores.—Dijo mi madre corriendo a abrazarme llorando también.—Sólo una semana ¿vale? Solo será una semana, se nos pasará volando, ya lo veras.—Trató de tranquilizarme mientras me secaba las lágrimas y depositaba un dulce y cálido beso en mi mejilla. Mi padre me dio otro en la frente.

—Hasta pronto mi pequeña princesa.

***

Ví como mis padres desaparecían tras las grandes puertas de Demont y yo sin embargo me quedaba atrás, no volvería con ellos. Por lo menos no hasta el próximo viernes.

—Por favor sígame señorita Rose.—Me pidió la mujer.

Un hombre con pinta de ser bastante fuerte no seguía por detrás cargando con mis maletas. Subimos tres pisos en ascensor, aquello era increíblemente enorme. Recorrimos un largo pasillo y nos paramos frente a la que me correspondía, la 319, a 19 habitaciones del ascensor por el que habíamos salido.