Venís siendo una desconocida,
Sin rostro,
Sin corazón,
Tan solo una corriente que arrastra todo a su paso.Venís cuando no me se defender,
Cuando mis pies no bailan,
Cuando estoy rota y no encuentro las piezas de mi alma.De tanto que venís aprendí a entender tu silencio,
Eres eso que nadie conoce y juzga.Me he desnudado cada vez que he sentido tu presencia,
Tú me tomas de la cintura y me has sacado a bailar,
Escuchas mis ebrias palabras toda una noche llena de humo.Tu soledad no me deja sola,
Venís y te vas como si no existiera muro,
Como la noche y el día,
Solo que eres impredecible.Yo te recibo con una pluma para convertirte en letras y quedarme con una parte de ti,
Así cuando te vayas, no te vayas del todo.