Eres Mi Magia (It Harry Potter Au)

15

Todo era oscuro, sus ojos tardaron en adaptarse a su entorno, parpadeo un par de veces, su cabeza dolia, se sentia aturdida, fue entonces que se dio cuenta que estaba en una habitacion, ella estaba recostada en una cama incomoda y con una delgada manta cubriendola. Se levanto e inspecciono la habitacion con cuidado, era iluminada solamente por una pequeña ventana en lo alto de la pared.

Sentia frio y dolor, entrecerro un tanto los ojos pues su vista era nublada debido a que no tenia sus gafas, la habitacion era demasiado fria y sucia para ser su dormitorio. Trato de rocordar lo ultimo que habia sucedido pero solo pudo retomar su memoria hasta el momento en el que entro en el callejon con Fred, habian sido guiados por su pequeña ave.

Entonces un agudo dolor surco sus sienes y se disperso por toda su cabeza, bajo hasta su espalda y luego se repartio por sus extremidades.

Gimiendo de dolor retrocedio viendo como su piel se tornaba un poco grisasea y sus venas comenzaban a ser mas notorias, observo sus manos con teror mientras las venas que esta recubrian se tornaban de negro, era como si un liquido que corriera dentro de ellas las tiñieran asi.

Retrocedio aturdida por el dolor hasta chocar con una pared de aquella celda, y luego sucedio, sus brazos comenzaron a atrofiarse, se negaron al movimiento que queria darles la joven y comenzaron a sentirse rigidos, pesados, se mantuvieron abajo. A los pocos minutos sus piernas comenzaron a ceder tambien hasta el punto en que se quedaron completamente inmoviles al igual que sus brazos.

Su pecho subia y baja irregularmente por su respiracion agitada, queria gritar pero su boca se negaba a abrirse, el unico organo que podia mover a voluntad eran sus ojos, nublados por su pobre vista, resultaban hasta cierto punto inutiles. Una gota de sudor frio paso por su frente cuando escucho pasos pesados hacercarse, ella se limito a mirar la habitacion con temor impregnado en sus ojos.

--veo que ya despertaste-- hablo un hombre alto, vestia una tunica negra con una larga capucha que cubria por completo su rostro, el hombre saco una varita negra, liza y regular de tamaño y susurro algo.

Casi de inmediato las piernas de la chica comenzaron a caminar contra su voluntad hasta aquel hombre, el levanto su vista ligeramente dejando asi ver una macabra sonrisa.

--hola Ali-- saludo y la chica abrio mas los ojos. ¿Como es que aquel hombre sabia su nombre? ¿acaso la conocia? Penso con desesperacion. El hombre tomo el brazo de la chica y pronunciando palabras inentendibles salio de la habitacion con la joven.

Caminaron por un largo pasillo mal oliente, oscuro y frio por unos minutos, por el camino la chica recordo su varita que era extendible, era del tamaño de una navaja dentro de su bolsillo asi que penso que si ese hombre tratara de lastimarla podria defenderse con su varita. Descarto la idea momentos despues al recordar que sus musculos estaban a completa disposicion del extraño.

Minutos despues llegaron a un gran espacio iluminado por ventanas opacas en el enorme techo que quedaba a miles de metros sobre ambos.

El hombre solto con brusquedad a Alice y por primera vez destapo su rostro: era un tipo palido como la leche, su cara delgada y seria le daba un toque espelusnante, su cabello cafe era perfectamente arreglado. El hombre carraspeo su garganta para llamar la atencion de la chica que miraba a su alrededor con miedo e intriga.

Alice giro su mirada hacia al hombre y al ver su rostro comenzo a temblar, sus ojos se abrieron tanto que podrian salirse de sus cuencas, al ver ese rostro que tanto daño le habia hecho sintio su cuerpo desfallecer, queria correr, gritar, abrazar a Stan y huir lejos.

Al ver a ese hombre que tanto daño le habia hecho quizo retroceder.

Al ver a ese hombre, ese que se hacia llamar su padre.