One Shots // Albalia

Lluvia

Un relámpago ilumino la noche sin luna que tenia ante sus ojos. Segundos después, sonó un trueno que hizo temblar hasta el banco donde se encontraba sentada.

Cómo había acabado ahi? Ah si, lo acababa de recordar. Por ella. Como se podía haber ilusionado sin motivo aparente? Lo que para ella significaba un claro síntoma de coqueteo para la otra solo era un juego.

Sintió cómo las primeras gotas le caían encima pero ni se movió. Para qué? A lo mejor conseguía que la lluvia la sacara a Alba de la cabeza. 

Siempre había sido la fuerte de la pandilla. La chula. La que nunca se enamoraba. La que tenia a todos detrás suya, tanto hombres como mujeres. Hasta que llego Alba. Y cuando llegó, ella cayo a sus pies sin darse cuenta.

Cayo ante esos enormes ojos avellana que cada vez que los miraba se perdía como un naufrago en un mar. Cayó ante su preciosa sonrisa, que iluminaba hasta la estancia mas oscura. Cayó ante su risa, que cada vez que la oía, le provocaba un cosquilleo que se extendía desde el pecho hasta el resto de su cuerpo, haciéndole sentir un calorcito que jamás había sentido nunca.

Por no hablar de su cuerpo, que era la ambrosía de los dioses personificada en ese cuerpo tan pequeño y adorable. Como se movía cuando bailaba y lo peor, como se movía a su alrededor para provocarla. Conseguía encenderla como una cerilla en cuestión de segundos.

Negó con la cabeza, desechando esas imágenes de su cabeza. Abrió los ojos y se dio cuenta de que aunque estaba lloviendo, ella no se mojaba. Miro hacia arriba y vio un paraguas encima de su cabeza y cuando giró a ver quién llevaba el paraguas la vio. Automáticamente se tensó.

- Qué haces aqui, Alba?-

- Buscarte... Te vas a poner mala, Nat...-

Cerró los ojos ante ese apodo.

- Deja de llamarme asi... Perdiste el derecho a llamarme asi en el momento en el que te reíste de mi...-

- Yo no me he reído de ti!-

Dio una carcajada irónica.

- Como digas...- Se levantó del banco, empezando a mojarse- Me voy, que te vaya bonito, Alba...-

Noto como le cogía del brazo y la obligaba a sentarse de nuevo en el banco. Hizo intento de levantarse pero noto como se movía a su lado y se sentaba a horcajadas encima de sus piernas, soltando el paraguas en el proceso, empezando a mojarse las dos.

Asi no podía. Asi sería imposible. 

Noto sus manos en sus mejillas y su frente pegarse a ella.

- Nat... No te vayas, no me dejes así...-

La cogió de las muñecas y le bajo las manos para separarse de ella y mirarla a los ojos. 

- Que se supone que tengo que hacer Alba? Explícamelo, porque no se que se supone que tengo que hacer cuando me entero de que el guapísimo chico que ha aparecido es tu novio y que no se te ha ocurrido mencionarlo ni cuando me estabas pidiendo que te follara en el baño del bar donde estábamos cenando...- Esperó unos segundos- Venga, soy toda oídos...-

- Yo... No se que me pasa cuando estoy contigo... Consigues atraparme de una manera que nadie ha conseguido... - Se solto de sus manos y volvió a cogerle de las mejillas- Por favor Nat, solo...- volvió a pegar sus frentes y se acerco hasta que sus alientos se entremezclaban y notaban mutuamente el calor de sus labios, de los que ya caían gotas por la fina lluvia que las envolvía- solo quiero estar contigo...-

- Alba...-

- Por favor...- acerco aun mas sus caderas y le cogió el labio inferior entre sus dientes, soltándolo segundos después- sácame este frío de mi pecho, déjame derretirme contigo esta noche, por favor...-