¿Quién es ese hombre?

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Después de que el Doctor Bey quemara el papiro donde se encontraba la ubicación de Hamunaptra, Jonathan le confeso de donde había adquirido realmente la caja, lo que los llevo a visitar la prisión del Cairo.

-Vengan, acérquense por aquí y bienvenidos a la prisión de el Cairo mi humilde hogar- Decía un hombre de baja estatura y gordo que recibía a los hermanos Carnahan quienes entraban tomados del brazo.

-Dijiste que lo habías conseguido en una excavación en Tebas- exclamo Evan entre indignado y enojado con su hermano

-Pues me equivoque- exclamo el mencionado

-Me mentiste Jonathan-

-Le miento a todo el mundo, por que te crees tan especial- decía el mayor de los Carnahan quitándole interés al asunto

-Soy tu hermano-

-Eso te hace más vulnerable-

-Jonathan se la robaste a un ebrio de la cárcel local-

-Se le cayó de la bolsa, así que no creo que sea buena idea que estemos aquí-

-Jonathan cuando dejaras de ser tan cobarde- se giro hacia el dueño de la prisión y pregunto -¿Quiero saber por que ese hombre esta en prisión?-

-La verdad es que no lo se, pero oí que ustedes venían, se lo pregunte yo mismo- contesto el hombre con un poco de sobre peso -Yala- ordeno a uno de sus subordinados

-¿Y que fue lo que le dijo?- pregunto Evan

-Dijo que solo buscaba diversión- la puerta que se encontraba detrás de unas rejas se abrió y de ahí salieron dos hombres arrastrando a la fuerza a otro hombre y lo arrojaron contra los barrotes.

Su aspecto era muy desarreglado, su cabello muy largo y toda su ropa rota, pero lo que mas le llamo la atención a Evan fueron sus ojos de color verdes, que a contra luz se veían de un color gris platinado.

-¿Ese es el hombre al que le robaste?-

-Eh... si exacto, así que por que mejor no nos vamos antes de que tenga una discusión- contesto disimuladamente Jonathan mirando para otro lado y no queriendo acercarse al encarcelado

-¿Quien eres tu?- pregunto el recluso detrás de las rejas, su oz a pesar de su apariencia era tan magnética que cualquiera caería a sus pies- ¿Y quien es el tipo?- pregunto esta vez mirando a Evan

-¿Tipo?- contesto muy ofendido Evan

-Bueno, eh... nosotros, soy una especie de misionero que esparce la palabra y el es mi hermano Evan- contesto evitando a toda costa mirar al recluso

-Como le va- saludo educadamente extendiendo su mano, esperando alguna respuesta del otro

-Creo que no es tan tonto...- contesto de manera amargada, y aquel seño fruncido que tenia siempre en su rostro

-¿De que esta hablando?- volvió a contestar Evan mas ofendido que la vez anterior

-Antara- grito el carcelero y se fue al parecer a arreglar otro altercado, dejando solo a Evan y Jonathan con el misterioso hombre tras las rejas

-Pregúntale de la caja-le dijo Jonathan a su joven hermano

-Ah... nosotros... ¿Hola disculpe?, Nosotros encontramos- dijo al ver que estaba distraído- Los dos encontramos su pequeña cajita y vinimos a preguntarle sobre ella-

-No!-

-¿No?- pregunto Evan desconcertado

-Vinieron a preguntarme sobre Hamunaptra- Jonathan le hizo señas a aquel hombre de que bajara la voz

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