Hola, primero que todo, les recomiendo darle play a la cancion antes de comenzar a leer. Es una pequeña historia (muy pequeña de echo) que la verdad espero que disfruten. Por favor voten y comenten que les parecio.
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El viento soplaba de norte a sur y en la noche solo un extraño sonido se percibia. Con sus ojos redondos observaba por la ventana al niño que acostado en su cama no hacia mas que mirar a la resplandesiente luna. Una y otra vez este extraño sonido se repetia, pero en estas ultimas ocaciones no era el unico sonido en medio de la noche, esta vez estaba acompañado de un sollozo y juntos creaban una melodia melancolica; todo a su alrededor callaba. La luna se oculto en medio de las nubes, el viento agitaba las ramas secas, el niño lloraba mientras miraba el espectaculo de la noche. Los ojos redondos se acercaron agilmente a la rama mas iluminada por la tenue luz de luna. El niño, con miedo, observo como la parte trasera de la cabeza de esta figura se giraba completamente para convertirse en unos ojos rojizos. El niño sintio como esos ojos no solo miraban su cuerpo, si no que tambien entraron en su alma. El buho con un aleteo casi inaudible se paro sobre su ventana, pidiendo con un ligero picoteo que le dejara entrar. El niño detuvo su sollozo y miro fijamente al buho, pues este tenia algo extraño e inexplicable que le daba una sensacion de confort. Se levanto y abrio rapidamente su ventana, dando asi un paso hacia atras. El buho entro a su cuarto rapidamente y se poso sobre el hombro del niño, llenandolo asi de un miedo repentino a que este animal le dañara. El sonido peculiar de este animal le quito al niño todo sentimiento de duda o temor y lo lleno de una extraña alegria desbordante. El buho se poso en su cama, diciendole de esta forma al niño que era tiempo de dormir y asi pues, el niño se metio entre sus sabanas y durmio tranquilo hasta la noche siguiente.
"Buenas noches" Dijo el niño al cielo y se acosto en su cama a mirar nuevamente el magico expectaculo que la noche le ofrecia y que, por alguna razon que el no comprendia, la mayoria de los humanos ignoran.
El niño observo como la luna, esta vez un poco mas gorda, le miraba nuevamente, sin embargo aun sentia ese vacio en su pecho, esa sencacion de que no todo estaba lleno. Esta vez la noche le ofrecia un expectaculo diferente al de dias anteriores. Los grillos tenian la melodia principal en la sinfonia de la noche, el viento daba acordes que llenaban el alma y una que otra pequeña ranita daban los bajos perfectos. El cielo estaba de un extraño tono de azul y lila que le hacia ver magico e iluminaba a nuestro artista principal del dia de hoy: El buho. El niño al ver a este personaje en la majestuosa obra de la noche se levanto alegre, abriendo su ventana. El buho volo hacia el y se poso sobre su hombro nuevamente, dandole al niño una sencacion de calidez como si se tratase de un abrazo.
"Que extraño animal" Pensaba el niño. Despues de todo ¿Como es que un animal de hacia sentir de aquella extraña manera? ¿Acaso este buho era algo mas que eso, un extraño animal?
El niño se dirigio nuevamente a su cama junto a este placido amigo mientras que, mirandole a los ojos, le contaba fasinantes historias sobre viajes, animales, bosques y buhos, que su padre le solia contar, a lo que el buho respondia con el mismo canto de todas las noches, pero con una intensidad diferente, como si este reaccionara ante las maravillosas historias. Poco a poco, en medio de historias, el niño quedo dormido.
Tercer noche, tercer encuentro. El se puso su pijama rapidamente, apago todas las luces de su cuarto para asi poder apreciar por completo el expectaculo. La noche era cada vez mas increible, justo como su padre contaba. La brisa fria comenzo a mover algunas ramas que le llenaron de nostalgia, los grillos esta noche durmieron, sin embargo, ciertos animales que jamas se habian escuchado daban gritos en una tonada fortissima que daba la imprecion de estar en una de las sinfonias de Dovrak, y como si esto no fuera ya sorprendente, las estrellas salieron disparadas de sus sitios y se dirigeron hasta otro lugar. El buho le miraba escondido tras una gran rama, con una emocion desbordante y sin poder oculatrla mas, volo hacia la ventana del niño, pero este ya estaba dormido para esta ociacion, asi que el buho simplemente se limito a mirarlo desde su ventana, escuchando la sinfonia que tanto adoraba este niño.
Un poco despues de la media noche el niño abrio sus ojos dirigendolos hacia la ventana, donde noto que su amigo le miraba o, mas bien, le cuidaba desde afuera. Sin pensarlo dos veces el niño abrio la vantana y le dejo entrar y, como siempre, el buho se puso en su hombro.
El niño conto una historia que jamas habia contado antes, la historia de una terrible muerte, la historia mas odiada por el niño, ya que estaba llena de dolor y sufrimiento antes de poder llegar al costoso final feliz, final en el que su papa lo abrazaba y lo calmaba un poco. Esta era la historia de la que mas solia hablar su padre, ya que este decia que hay mucho dolor en la vida real antes de poder llegar a ese magico final feliz. El niño lloraba sin parar mientras hablaba, la tristeza le consumia y el buho, sin razon aparente, emitia alaridos de dolor y tristeza mientras miraba los ojos del niño. El buho volo hacia el y se poso en sus regazos, dandole al niño la sencacion de un abrazo
"¿Quien eres, extraño animal?". Se pregunto en voz alta el niño. El buho volo de sus regazos y se poso en un un cuadro que se encontraba sobre su mesa de noche. Este cuadro era de el difunto padre del niño, quien habia abandonado esta vida hace tres dias exactos. El niño miro atonito al buho, pues habia comprendido que ese buho se le hacia familiar puesto a que, a pesar de no se un humano, tenia cierto parecido con su padre. El buho intentaba sacar algo de una esquina del cuadro, su pequeño pico no era lo mejor para la mision, sin embargo finalmente lo logro. Un pequeño papel salio del cuado y cayo sobre los pies del niño. El buho volo a los hombros del niños mientras este leia lo que aquel pequeño papel tenia escrito.
"Hijo, te amo. Simpre recuerda que jamas habra mayor arte que el de la naturaleza y, por sobre todas las cosas, nunca olvides que jamas te abandonare y que, probablemente, si lees esto, ya estoy de nuevo junto a ti".
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El búho
Cerita PendekPor que con una mente abierta e inocente como la de un niño, todo puede verse como una maravilla