Oficialmente comienza el verano.
¡Por fin!
Yo Lucy Banks voy disfrutar de mis vacaciones antes de comenzar las clases en la Universidad de Nueva York.
Mariel mi mejor amiga me ha invitado a su casa para una pool party en honor al inicio de las vacaciones, afortunadamente seremos solo amigos del instituto, quisiera que mi novio Paul estuviera aquí pero tuvo que ir a visitar a sus abuelos a Seattle, aunque procuraré no extrañarlo tanto ya que estaremos juntos en la universidad.
Después de mucho tiempo tratando de escoger un traje de baño, me decido por uno de dos piezas azul turquesa que resalta con mi piel clara, espero que en este verano logré un lindo bronceado.
Cuando bajo a la sala mis papás están viendo las noticias.
- Pa' ma' me voy, recuerden que esta noche duermo con Mariel y regreso mañana temprano o a más tardar a las ocho.
- Si mi amor, disfruta de la fiesta y cuídense mucho- me dice mamá
- No se preocupen, la fiesta es en su casa.
- Hay mucho de que preocuparse, son casi adultos con hormonas.
- Papá enserio no te preocupes, a mí no me interesa nadie que no sea Paul.
Tomo mi mochila que había preparado desde temprano, la reviso una última vez para comprobar que llevo todo lo necesario, solo me gusta llevar mis cosas por qué me encanta el suavizante que usa Lori.
Cuando salgo de casa para subir al auto, el fuerte rugido de un motor llama mi atención, así que giro mi vista para ver el auto y solo puedo alcanzar a ver qué era un Camaro negro, el conductor imposible verlo debido a la velocidad y los vidrios polarizados.
El auto era una verdadera preciosidad, ojalá y el conductor le hiciera justicia y fuera un chico de muy buen ver.
Dejando mis locos desvaríos subo a mi auto para por fin irme con Mariel.El tráfico no ayuda, a pesar de que son vacaciones me esperaba algo más fluido pero no, mi amada ciudad es muy famosa y por lo tanto vacaciones o no aquí siempre hay mucha gente.
Cuando aparco fuera de la casa de Mariel la música súper alta inmediatamente inunda mis sentidos.
Molly la nana de Mariel es la que me abre la puerta, amo a esta señora es un amor, es como mi abuelita ya que las mías fallecieron cuando era muy pequeña, así que nana Molly se ha ganado mi cariño.
- Mi niña Lucy, que bueno verte, Mariel está en su habitación.
- Gracias Nana, a mi también me alegra verte, nos vemos en un rato, voy a ver a la loca de Mari.
Ella se lleva mi bolsa mientras subo las escaleras, los papás de Mariel son unas personas muy ocupadas, su madre es una famosa diseñadora de modas y actualmente está fuera del país ya que según me contó Mariel una hija de un famoso empresario Taiwanés quería que ella diseñará su vestido de bodas, por su parte el señor Rosse es el dueño de una inmobiliaria muy importante en el estado y se ha ido fortaleciendo en todo el país ya que hace poco inauguró tres cedes, por eso mi amiga vive en una hermosa, impresionante, pero vacía mansión.
Su cuarto es un sueño, tiene una cama enorme con dosel, las paredes son en tonos claros y están adornadas con fotografías familiares, reconocimientos de la escuela y sus medallas de las competencias de matemáticas, tiene un vestidor que no tiene nada que envidiar a Kylie Jenner y un baño enorme.
La loca de mi amiga se encuentra viéndose frente al mega espejo que está a un lado de la ventana que da al patio trasero.
- Hola- la saludo observando todo el desastre en su habitación, ropa por doquier.
- Hola, que bueno que llegaste. Ayudame a elegir un bikini perfecto.
- ¿Qué no se supone que habías ido a Sone solo por eso?- le pregunto ya que pasó todo un día en esa tienda solo para conseguir su dichoso bikini perfecto.
- Si, pero sabes que Nana cocina delicioso y creo que me gane unos kilos de más.
- A ver, muéstrame como se te ve - le pido ya que desde que llegué la vi cubriéndose con una sábana, mi amiga de verdad está mal.
Lentamente va soltando la sábana y cuando esta cae al suelo confirmo que mi amiga está loca y es una exagerada, el bikini rosa con detalles en negro le queda espectacular, tiene un cuerpo divino que hace que todo le quede bien.
- Mariel, sabes que soy tu amiga y nunca te he mentido ni lo voy a hacer ¿Verdad?- le pregunto ella me observa confundida.
- Sí, lo sé.
- Bien, porque lo que te voy a decir no lo voy a repe...
- Se me ve horrible ¿Cierto?- pregunta imterrupiendome.
- Déjame terminar, Mariel te ves guapísima, soy tu amiga y créeme cuando te digo que luces fabulosa.
- ¿De verdad? - pregunta sin creerme
- De verdad- le aseguro, no me gusta que se acompleje.
- ¿Tanto para que Simón se vuelva loco cuando me vea?
Lo intento, juro que lo intento, pero no puedo evitar rodar los ojos con fastidio al escuchar ese nombre.
Simón es el mejor amigo de Paúl y eterno crush de Mariel que por azares del destino sigo sin entender porque no le hace caso a mi amiga, a veces pienso que es gay, si no no se por que la ignora tan cruelmente.
La verdad no nos soportamos y solo llevamos una relación cordial por Paúl, es muy reservado y poco expresivo.
Cuando Mariel me confesó que le gustaba no pude evitar reírme, simplemente eran polos opuestos mi amiga es la alegría en persona, siempre alegre y llena de amigos, Simón por su parte era callado, alejado lo más posible de los demás, de echo si vino hoy a la fiesta fue por hacerle un favor a Paul.
- Sí Mariel le va a gustar.
Es lo único que le digo para que suelte un grito de alegría y me jale fuera de la habitación.
Cuando llegamos a la piscina la mayoría de nuestros compañeros han llegado, incluso Simón.
- Hola hermosa- escucho a mis espaldas, giro encontrándome con Marisa la tercera de nuestro grupo, desde que llegué a la ciudad hemos sido Mariel, Marisa y yo.
- Hola guapa, luces increíble- y no mentía mi amiga es una morena puertorriqueña que tenía a muchos chicos a sus pies.
- Gracias, tu no te quedas atrás- me regresa el cumplido, no seré tan fabulosa como mis amigas pero tengo lo mío.
Apenas termino de hablar cuando siento la frescura del agua, Richard a sido el gracioso que nos arrojó al agua.
Las risas de mis compañeros no se hacen esperar, los que ya estamos en el agua comenzamos una guerra.
Los demás comen y bailan.
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CONTIGO
Teen FictionLucy en contra de sus propios sentimientos se da cuenta de que no es necesario conocer a una persona por años para amarla, hay ocasiones que basta solo una mirada para que tú mundo se tiemble y cambie por completo. Todo lo confirma cuando de manera...