Hotel Edén

CAPÍTULO 4 "la ouija y la desaparición"

13 de noviembre del 2019 (00:25AM)

Narra Agustín:
Me sentí muy mal por esta situación, se supone que este viaje era para unirnos como grupo, no para separarnos. Emiliano parece haberse calmado y se sentó en la ronda intentando no hacer contacto visual con ninguno y luego comenzó a hablar.

-sigamos con esto- dice poniendo el puntero en el tablero

No estaba seguro de jugar pero no tenía otra opción, no quería discutir con él y además yo tambien quería hablar con Ignacio, por lo menos para saber si se encontraba con mi hermanita. El juego es así, en una ronda hay que juntar nuestras manos en el tablero y luego le hacemos nuestras preguntas y en respuesta el puntero se mueve por el tablero hacia el sí o el no o el resto del abecedario movido por el espíritu, así que proseguimos a poner nuestras manos en el puntero rezando para que no nos suceda nada malo. Los nervios se estaban apoderando de mí. Pude ver que las manos de Helem estaban temblando así que le hice una señal de que todo estará bien y ella asiente con la cabeza. Emiliano fue el primero en hacer la primera pregunta.

-¿Ignacio estas aquí?- dice un poco nervioso de lo que pueda pasar

Pasaron varios minutos sin que suceda nada pero luego el puntero comenzó a moverse marcando el sí, estabamos muy aterrados y a la vez facinados de que haya funcionado, pude ver como Claudia y Emiliano tenían una sonrisa en sus caras. Claudia hiso la segunda pregunta.

-¿Estas en la habitación en este momento?- dice Claudia con toda la intriga. El tablero marco sí, dios no puedo creer que esto esto sea real

-¿Cómo te encuentras?- sí.....creo que fue algo estupido de mi parte preguntar eso

Pasaron varios minutos que para mí fueron una eternidad entonces Tiago decidió cambiar de pregunta

-Ignacio, ¿Quíen de los que está en esta habitación morirá primero?- dice mientras todos lo miramos aterrorizados ante la pregunta. Temí cuando el tablero comenzó a moverse para formar el nombre de la persona,
"Soraya" marco el tablero
Aquí fue cuando me arrepentí de haber jugado a esta cosa del diablo, debí haber escuchado a Soraya cuando dijo que no había que jugar a la ouija, estoy diciendo esto porque las luces se empezaron a prender y apagar, se escuchaban ruidos fuertes como golpes en la pared y en la puerta, mi corazón estaba a mil, todos comenzaron a asustarse pero en un momento todo paró, o empeoró.
Sentí las miradas de todos hacía mí dirección, estaba confundido y asustado a la vez por las expresiones que tenían en sus rostros

-¿Qu- qué sucede?- pregunto con temor

-Ignacio- dice Claudia

Al escuchar eso quede paralizado. No quiero voltear, no quiero, pero lo hice de todos modos, voltee lentamente, casi me desmayo al comprobar que era cierto, era Ignacio, pero con un aspecto terrorífico. Estaba pálido, su ropa estaba rota, tenía varios cortes, pero lo que más me llamó la atención fue su mirada, esta expresaba maldad y oscuridad. Todos comenzaron a gritar y de la nada desapareció. Escuchamos un grito desde el baño, lo habia olvidado, Soraya no había salido en ningún momento, así que todos corrimos hacía la puerta, esta no se habría, entonces Emiliano dió una patada a la puerta haciendo que se habra, yo le estaba rezando a dios para que Soraya se encuentre bien.....nada....Soraya ya no estaba. Emiliano calló de rodillas, Claudia y Helem comenzaron a llorar, Tiago estaba llamando a la recepcionista y yo aún estaba en shok ¿Acaso Ignacio se la llevó? ¿Por que? ¿Por qué haría eso? ¿Donde está Soraya? No duré nada y estallé del llanto callendo de rodillas con Emiliano.

-si le hubiera hecho caso no habría pasado esto, es mi culpa- dice Emiliano entre lagrimas, y yo solo proseguí a abrazarlo.