VI

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Las lágrimas estaban mojándolo todo. Sus pómulos, el puente de su nariz, cada una de sus pestañas, se acumulaban en las curvas de sus orejas, entre su cabello y las fibras de su almohada. Despertó tomando una bocanada de aire y sentándose tan de repente que un mareo le sobrecogió el cuerpo.

Despierta, consiente, asustada, sintiendo los latidos de su corazón acumularse en su garganta y las manos temblar sin control, se lanzó a buscar su celular, que estaba conectado cargándose. 

Eran las once de la mañana. Las notificaciones eran las mismas de siempre, un par de mensajes de su hermana, un par de tweets de sus cuentas favoritas, unos mails sin leer y la alarma postergada. Abrió los mensajes de su hermana mientras el cuerpo de a poco se le relajaba en la oscuridad fresca de su habitación de ventanas cerradas.

-Seojin"Esta noche hay fiesta en la casa de Nam. Porfa recuerda traer mis medias, las necesito. Estaré en casa de papá. xoxo (Puedes traer a Seokie si quieres)" 

Replicó con un escueto "okay" y abandonó el celular entre las sábanas. Instintivamente, atrajo las piernas hacia su pecho y las abrazó, apretando con fuerza. Su respiración era normal de nuevo, las lagrimas estaban medianamente secas en su piel y la ponían tirante, pero estaba bien, no le importaba.

Todo había sido un sueño. 

Un maldito sueño de mierda, jodidamente realista.

Podía sentir en sus terminaciones nerviosas el golpe de la caída y la desesperación y la pena antes de lanzarse. Y eran de ella misma, no eran de Jimin. Pero no podía quitarle peso al resto. No podía fingir que todos los sentimientos en el sueño eran una simple simulación de lo que otra persona viviría al hacerlo. De lo que ella creía que pasaría. Porque podía recordar lo que se sentía recibir la noticia. Era una mentira, si, no lo había vivido, pero eso no hacía que se sintiera menos real.

Sabía que, de recibir esa noticia, su reacción sería mucho peor.

No quería pensar en ello.

Ni quería pensar en ella. 

Jimin. (Su querida pesadilla favorita y su ex.)

No quería pensar.

Estaba tomando el celular para escribirle a Hoseok, el chico con el que salían desde hacía unas semanas, y comentarle de la reunión, cuando leyó que su hermana había contestado.

-Seojin : "Por cierto. Si no quieren venir lo entiendo, pero Namjoon invitó a Jimin (es nuestra amiga). Solo sentí que debía avisarte... aunque ya pasó un largo tiempo y no creo que te afecte."

-"No hay problema. Allí estaremos."

Y así Jeongukk comprendió que el mundo la quería ver jodida. Y se lanzó a la cama, con el rostro y las sábanas aún llenas de lágrimas húmedas.

A veces detestaba mucho su vida. Sobre todo cuando una voz interna, aún sensible por el sueño, le recuerda que, al menos, Jimin estaba viva.

Y no sabía cómo sentirse al respecto de la calidez que ese pensamiento le producía.


Continuará en Consequences 2 : Never be the same [KOOKMIN FEM]


 Esto se descontroló ahre

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... Esto se descontroló ahre. Bueno.... Si la historia les gustó, supongo que nos vemos en "Never be the same".

Consequences [KOOKMIN FEM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora